Los soportes funcionan
El Ibex confirmó el viernes el rebote alcista del jueves con una subida del 2,2%, mientras los bonos de la eurozona provocan pérdidas del 4,7% desde máximos.
El Ibex confirmó el viernes el rebote alcista del jueves con una subida del 2,2%, mientras los bonos de la eurozona provocan pérdidas del 4,7% desde máximos.
Mientras la bolsa española confirmaba su buena salud el viernes, los inversores presenciaban el incendio de la renta fija en la eurozona. Pese a que en la última jornada semanal la rentabilidad de los bonos experimentó un descenso, ésta se ha disparado desde los mínimos del año.
A los que dieron al dólar y a la libra por caídos en la batalla del mercado de divisas, se equivocaron. La revancha de las dos divisas se construye sobre cimientos sólidos.
En la última semana, se ha producido un fuerte proceso de venta de activos europeos en los mercados financieros que ha tenido su origen en Alemania. Los inversores se han deshecho de todo: deuda, bolsa y divisas. Pero, ¿qué hay detrás de este proceso? La culpa no ha sido de Grecia, ni de Reino Unido, ni de cualquier otro riesgo geopolítico.
El patrón de crecimiento de la economía estadounidense ha cambiado en los últimos años. Ahora, los datos del primer trimestre suelen flojear y el ritmo del PIB se recupera a partir del segundo. Un efecto que, a falta de valorar si será algo permanente (y por tanto, se incluiría en las correcciones estacionales), o si se debe sólo al mal tiempo de los últimos inviernos, deja claro que la llegada de la primavera tiene efectos muy positivos para la economía del país.
Unos 3.900 empleados públicos griegos volverán a sus puestos de trabajo durante este mes, tras ser aprobado el proyecto de ley que presentó el Gobierno de Syriza en el Parlamento heleno.
En toda la crisis económica no se había visto una racha tan mala del bono alemán: ocho sesiones consecutivas de subida de su rentabilidad. Desde junio de 2006 no se producía un deterioro tan largo, lo que pone de manifiesto el nerviosismo de los inversores.
Ya sin los efectos negativos del invierno, los expertos creen que EEUU debería volver acrecer y la Fed, subir los tipos, lo que eliminaría la debilidad del dólar del último mes y empujaría al euro hacia la paridad.
La incertidumbre griega, los malos datos económicos de EEUU, el rally tan pronunciado de la deuda, la mejoría de la inflación... El mercado tiene muchos motivos para argüir el repentino giro de la renta fija en las últimas semanas, pero ninguna razón convincente que explique el deterioro tan fuerte que se ha producido.
El 15 de agosto de 1971, Richard Nixon comparecía ante el mundo con el rostro desencajado para anunciar una lucha contra los "especuladores internacionales". En esa intervención anunciaba el fin de los acuerdos de Bretton Woods y cancelaba la paridad dólar-oro de forma temporal, aunque acabaría convirtiéndose en permanente.