Malas noticias para los republicanos
"La OPEP nos está estafando, y eso no me gusta", con estas palabras Donald Trump dejaba claro el pasado martes durante su discurso en la ONU que Estados Unidos mira con malos ojos la continua subida de los precios del crudo. Pese a las amenazas del presidente estadounidense al cártel petrolero, el precio ha proseguido su escalada alcista: el barril de Brent ya supera los 83 dólares y vislumbra en el horizonte la barrera de los 100. Las medias de Washington para bloquear la salida del crudo iraní al mercado y la lenta muerte de la industria petrolera de Venezuela hacen presagiar que el precio del barril seguirá subiendo durante los próximos meses, teniendo como principal víctima los bolsillos de los conductores estadounidenses.