Hace poco más de un año, la industria de la marihuana legal florecía en Estados Unidos espoleada por el aumento de estados que dieron luz verde a su uso para fines recreativos. La compra de Cura Cannabis Solutions por parte de Curaleaf por 1,200 millones de dólares para operar en 15 estados marcaba el punto álgido de un negocio que llegó a ser calificado por medios como el Washington Post y The New York Times como "el pelotazo del siglo", "la mayor disrupción en el mercado desde el nacimiento de Amazon".