Considerada una de las más grandes del mundo, la biblioteca del Congreso de Estados Unidos alberga más de 160 millones de obras. Un tamaño que hace imposible que una persona pueda leer todo lo que alberga. Algo similar ocurre con nuestro genoma, el conjunto de letras que forman el ADN. Hasta ahora, solo se ha leído un 1%-2% de nuestro material genético.