El optimismo que ha impregnado a la Unión Europea desde comienzos de año se ha visto alimentado por un giro notable en su política fiscal. En este nuevo contexto, uno de los temas más relevantes es el compromiso creciente con el gasto en defensa, una decisión que, si bien responde a urgencias geopolíticas, también simboliza un cambio de era en la arquitectura estratégica del continente.

Analista de fondos de Tressis