El año 2022, marcado por la guerra en Ucrania, la inseguridad energética y la inflación, está siendo devastador en los mercados. Y la sostenibilidad, que en 2020 y 2021 sí funcionó como un eficaz paraguas contra las pérdidas, no se libra de los descensos. Los principales índices bursátiles ESG (los que incorporan criterios ambientales, sociales y de buen gobierno, por su acrónimo anglosajón) sufren caídas de doble dígito y lo hacen incluso peor que los selectivos tradicionales. Conozca el portal elEconomista Inversión sostenible y ESG.