
Son muchas las personas que optan por ampliar la familia con la incorporación de un gato en la casa, un animal que, aunque domesticado y acostumbrado a convivir con los humanos, requiere de unos cuidados específicos y unas necesidades a tener en cuenta, también a la hora de hacer las revisiones veterinarias oportunas.
En España, al igual que en la mayoría de países, los gastos del veterinario responden a sanidad privada y, por tanto, corren a cuenta directa de los ciudadanos, algo a tener en cuenta antes de adoptar un nuevo animal, ya que estos costes suelen ser bastante elevados.
De hecho, es este uno de los motivos principales por el que los dueños de los gatos no llevan a sus mascotas al veterinario, al no poder pagar y hacer frente a los altos precios de las consultas y tratamientos para los felinos.
Un 28% de los dueños de gatos no los llevan al veterinario por motivos económicos
Así se recoge, por primera vez, en un informe publicado por la organización Cats Protection, que data del 2023, donde se indica que "la principal razón para no llevar a su gato al veterinario es el coste para los propietarios", algo que argumentaron un 28% de los propietarios de gatos, frente al 24% que alegaron esta razón en el mismo informe de 2022.
"Una mayor demanda de servicios veterinarios ejerce presión sobre las prácticas veterinarias, y muchos de los propietarios encuestados han comenzado a notar los efectos del aumento del costo de vida", recoge el informe, donde también se menciona que un 61% de los gatos acude anualmente al veterinario para una revisión rutinaria.
Entre otros datos relacionados con las visitas veterinarias para los felinos es que el 10% de los gatos con dueño no están registrados en un veterinario, aproximadamente 1,1 millones de gatos, mientras que el 49% de los propietarios tiene asegurado a su gato y el 72% de los dueños afirma que su gato está al día con las vacunas.
Además de esto, también se desgranan otros datos sobre la economía y lo que supone para el bolsillo tener un gato, ya que el 13% de las personas que antes tenían un gato indican que ya no lo tienen porque dicen no poder permitírselo.
Más allá de esto, el 3% de los dueños de gatos ha tenido que recurrir a los bancos de alimentos para alimentar a su gato y, entre enero y mayo de 2023, las renuncias a gatos por motivos económicos aumentaron un 48% respecto al mismo periodo de 2022.