
Tras diez días de ataques en la frontera entre Israel y Palestina, los apoyos internacionales han ido oscilando, aunque casi siempre más inclinadas a favor de Israel. Entre las escasas simpatías con las que cuenta la Franja de Gaza, Egipto es una de las más destacadas. Desde un primer momento, el país vecino reclamó al ejército israelí que emprendiese esfuerzo para cesar la escalada militar y para lograr la paz.
Este domingo, el presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, aseguraba tras un encuentro con su Consejo Nacional de Seguridad que su país estaba realizando todos los esfuerzos posibles para conseguir la apertura de un corredor humanitario por el paso fronterizo de Rafah, el único de la Franja que limita con Israel. "Se han comprometido a proseguir con los contactos con socios internacionales y regionales para reducir la escalada en Gaza, y para la llegada de la necesaria ayuda humanitaria", indicaba un comunicado de la Presidencia egipcia.
Bajo el punto de vista del Gobierno egipcio, "no hay más solución para la causa palestina excepto la que contempla la formación de dos Estados" al tiempo que "rechaza y deplora la política de desplazamiento o los intentos de liquidar la cuestión palestina a expensas de los países vecinos". Por ello, en el mismo comunicado se extendía "una invitación para albergar una cumbre regional internacional para abordar los acontecimientos y el futuro de la cuestión palestina.
Horas más tarde, y tras una reunión con el secretario del Estado estadounidense, Antony Blinken, en El Cairo, Abdelfatá al Sisi calificaba la respuesta de Israel ante los ataques de Hamás del pasado fin de semana como "castigo colectivo". "La respuesta de Israel a los ataques de Hamás el fin de semana pasado ha superado la autodefensa y ha alcanzado el nivel de castigo colectivo", consideró. Del mismo modo, argumentó que la iniciativa de Hamás "es el resultado de una acumulación de ira que se ha ido sumando".
No hay corredor humanitario
En la mañana de este lunes parecía que el ansiado corredor humanitario por fin podría materializarse. O, al menos, así lo avanzó la agencia Reuters tras un supuesto acuerdo entre Estados Unidos, Egipto e Israel. Sin embargo, momentos más tarde el propio primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, negaba dicho acuerdo. "No hay alto el fuego y de ingreso de ayuda humanitaria en Gaza a cambio de la salida de extranjeros", indicó en un comunicado la oficina de Netanyahu.
El Gobierno de Egipto, tras el intento fallido, ha acusado a las autoridades israelíes de "impedir" la entrega de ayuda al enclave palestino. "Desafortunadamente, el Gobierno de Israel no ha adoptado una posición para permitir la apertura del paso de Rafah en el lado de Gaza", ha dicho el ministro de Exteriores egipcio, Samé Shukri, que ha denunciado que "Israel está impidiendo que la ayuda entre en Gaza".