Las salidas a bolsa se frenaron en seco el año pasado por la incertidumbre. Este 2023, entre las salidas a bolsa más esperadas se encuentran las del grupo Cosentino y Cabify, ambos con una valoración inicial de entre 2.000 y 2.500 millones de euros. No obstante, los frentes abiertos de cada compañía parecen estar poniendo en riesgo estas decisiones.
Los problemas reputacionales afectan en la entrada a bolsa de una compañía. El ESG (más conocido como responsabilidad social corporativa) cada vez está ganando más importancia para los inversores. Sería, reconocen fuentes del mercado, uno de los primeros aspectos a valorar en cualquier folleto de salida a bolsa de una nueva cotizada que, en este caso, engrosaría los riesgos legales.
Desde enero, el mercado dio por hecho la salida a bolsa del grupo Cosentino han sido tan fuertes que hasta el mercado lo dio por hecho. Fuentes de Cosentino, sin embargo, han recocido a elEconomista.es que "no hay una decisión tomada sobre la salida a bolsa". La oferta de la empresa todavía está en el aire. Y, aunque desde la firma aseguran que solo han contratado los servicios de los bancos de inversión americanos Goldman Sachs y JPMorgan para estudiar el posible salto al mercado, las denuncias por silicosis pueden acabar enterrando el proceso.
Cabify tras los pasos de Uber
A raíz de los resultados tan optimistas a cierre de 2022, Cabify prepara su salida a bolsa bajo la guía de Morgan Stanley según publicó El Confidencial, como hizo su principal competidor, Uber, en 2019. La gran mayoría de los accionistas consideran que ha llegado el momento de dar el salto al parqué nacional y comenzar a sacarle partido a la inversión. Así, se prevé que en los próximos 12 o 15 meses la compañía empiece a cotizar, aunque todo depende de cómo evolucionen los diversos pleitos. De esta manera, Cabify tiene varios frentes abiertos. Con Auro, el principal proveedor de coches y a quien exigen exclusividad de sus servicios. Además, está en tela de juicio la legalidad de su negocio de paquetería en la Comunidad de Madrid y la limitación de licencias de vehículos con conductor (VTC).
Glovo, por otro lado, pretendía una salida a bolsa en el largo plazo. Así lo anunció el consejero delegado, Oscar Pierre, en 2021. Justo un año después, en julio, Delivery Hero se convirtió en el accionista mayoritario de Glovo con la compra de más del 90% de las acciones. Desde la semana pasada la compañía lleva acumulando caídas en la bolsa alemana. Ante la posibilidad de que los continuos contenciosos contra Glovo estén teniendo un efecto negativo en la cotización, la empresa no ha querido hacer declaraciones al respeto y simplemente ha alegado que "Delivery Hero no comenta sobre las especulaciones del mercado".