El mercado inmobiliario de nuestro país se encuentra sumido en una situación compleja tanto para compradores como vendedores, inquilinos y propietarios. Son precisamente estos últimos los que llevan ya más de dos años denunciando que se encuentran desprotegidos por la nueva Ley de Vivienda de 2023, tanto que casi la mitad piensa que esta normativa les perjudica cuando quieren poner alguna de sus propiedades en alquiler al considerarse con menos derechos que sus inquilinos.
"Ha causado la retirada de más del 30% de la oferta de arrendamiento disponible, ocasionando grandes tensiones en los precios", explica la directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, María Matos. Aunque en un primer momento el objetivo de esta normativa era facilitar el acceso a la vivienda y contener los precios, pareciera que está ocasionando todo lo contrario: en el primer trimestre de 2023 el precio se incrementó en un 12,2%, la mayor subida desde hace 18 años.
"Ahora, las dificultades de acceso a la vivienda en alquiler son peores que antes de la ley (...) al suponer un límite a la rentabilidad".
Y es que, según un estudio publicado por Fotocasa, esta normativa está propiciando la retirada de cientos de inmuebles del mercado del alquiler porque "desincentiva" mantenerla "al suponer un límite a la rentabilidad". De hecho, casi cuatro de cada diez caseros han sacado o se están planteando sacar sus pisos del mercado del alquiler por estar disconformes con la Ley de Vivienda.
Aumenta así el porcentaje de propietarios que pretende o piensa retirar su vivienda del mercado del alquiler en once puntos con respecto al año anterior. Son los propietarios catalanes y andaluces los que más intención tienen de hacerlo, algo que jugaría en contra de los futuros inquilinos de ambas autonomías, sobre todo en Cataluña, donde el número de personas que compiten por una vivienda es cuatro veces superior a la del resto del país.
Pasarse al alquiler vacacional
Siguiendo con los efectos que la Ley de Vivienda está provocando en los propietarios, sabemos que el 34% prevé pasar su vivienda al alquiler vacacional para sacar una mayor rentabilidad a su inmueble al mismo tiempo que se cubre las espaldas ante posibles impagos.
Para los que optan por dejar su vivienda en alquiler tradicional también se observa un cambio de tendencia desde que se aprobó el nuevo reglamento. Ahora cada vez más propietarios se inclinan por arrendar habitaciones en lugar del piso entero para sacarle más rentabilidad, una práctica que está cogiendo especial fuerza en la Comunidad Valenciana, donde prácticamente la mitad de caseros lo prefiere.
¿Y los inquilinos? También perjudicados
Pero no son solo los propietarios los que acusan sentirse discriminados en favor de los inquilinos, éstos también piensan que la Ley de Vivienda les dificulta el acceso a la vivienda. Prácticamente uno de cada dos cree que esta normativa les dificulta el camino a la hora de alquilar un inmueble a pesar de que les beneficia, al menos a los que tienen un contrato en vigor, "al evitar subidas anuales de precio desorbitadas en sus contratos".