
El mercado de la vivienda en Aragón en 2024 ha sido dinámico, pero ha ganado en agilidad en el último trimestre del año pasado y en los primeros meses de 2025. Un período en el que se ha visto que la decisión de compra se toma más rápido.
La evolución de los precios al alza y la escasez de oferta de vivienda, junto con una coyuntura de la economía favorable con un aumento del 8% de los salarios en el tercer trimestre del año pasado, la buena ocupación que reflejan los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) con una tasa de paro del 7,62% en el tercer trimestre de 2024, el crecimiento del PIB del 3,4% en el mismo período, el aumento del número de hogares y la bajada de los tipos de interés están favoreciendo este nuevo impulso del mercado inmobiliario en la comunidad aragonesa.
"Una persona con capacidad de compra toma la decisión más rápido por lo que pueda pasar", afirma Fernando Montón del Grupo Plaza 14, quien ha explicado que un retraso podría suponer un aumento del precio de la vivienda o bien que, cuando se acuda al promotor de la obra nueva, ya esté vendida.
De hecho, los precios en Aragón han subido un 4% en tasa interanual, alcanzando los 1.576 euros el metro cuadrado. Un incremento que ha sido desigual, puesto que en la vivienda nueva se ha producido un ajuste interanual que refleja una caída del 8,6% hasta los 1.929 euros el metro cuadrado -por venir de niveles más altos de años previos-, mientras que en la vivienda usada se ha registrado un 8,6% en tasa interanual tras subir el 1,6% en relación al tercer trimestre de 2024.
Es un dinamismo en la operativa que se evidencia en los datos recogidos en el Informe del Mercado Inmobiliario de Aragón, correspondiente al cuarto trimestre de 2024, realizado por la Cátedra en Mercado Inmobiliario de la Universidad de Zaragoza, que constatan que, en la comunidad aragonesa, se han registrado 4.424 operaciones de compraventa en los últimos tres meses del año pasado. Una cifra que supone una subida del 5,3%. Este porcentaje es todavía mayor si se compara con el mismo trimestre de 2023, produciéndose un incremento del 26,6%.
"El año 2024 ha ido de menos a más", ha apuntado Luis Fabra, responsable de la Cátedra del Mercado Inmobiliario, durante la presentación en Ibercaja, quien ha apuntado a que las previsiones en la evolución del precio reflejan el hecho de que "comprar más tarde puede suponer más precio. Empieza a notarse en el mercado" ante la mayor demanda y menor oferta, que presiona el valor de los pisos, con la ayuda de la bajada de los tipos de interés que contribuyen a que haya más personas interesadas en comprar una vivienda.
En concreto, en Aragón, oferta y demanda siguen sin casar. De acuerdo con los datos recogidos en el informe, las viviendas iniciadas en la comunidad aragonesa durante los últimos doce meses (cierre de tercer trimestre de 2024) han sido 2.433, con un descenso interanual del 22,3%, frente a las 2.301 viviendas terminadas, con un crecimiento interanual del 14,4%.
Vivienda nueva o usada
En vivienda usada se ha registrado un aumento trimestral del 0,7%, sumando 3.547 compraventas, mientras que en vivienda nueva se ha contabilizado 850 operaciones con un aumento del 29,8%. En los últimos doce meses, se han alcanzado las 16.434 compraventas con las que se registra el segundo trimestre consecutivo de crecimiento interanual, rompiendo la tendencia de seis trimestres consecutivos con descensos, dando lugar a un incremento interanual del 8,8% y del 2,3% en el tercer trimestre de 2024. El número de compraventas por cada 10.000 habitantes se ha situado en el 12,9.
Principalmente, los compradores han optado por adquirir vivienda usada, en el 80,79% de las operaciones, mientras que la obra vivienda nueva supone el 19,21%. Dentro de este último segmento, la vivienda nueva libre representa el 17,97% de las compraventas, porcentaje que baja al 1,24% en el caso de la protegida. Por su parte, la vivienda unifamiliar ha tenido un peso en Aragón del 20,84% y la vivienda colectiva, es decir los pisos, supone el 79,16%.

Y, a la hora de comprar, la superficie media se ha situado en los 96,32 metros cuadrados, siendo de 94,68 metros cuadrados en la vivienda usada y de 107,54 metros cuadrados de la nueva libre. En la protegida, la media es de 81,79 metros cuadrados.
La mayoría de las operaciones, el 93,99%, han sido realizadas por personas físicas frente al 6,01% de personas jurídicas. Cabe destacar el mayor dinamismo en las compraventas de los extranjeros con el 7,72%, alcanzando máximos. Los rumanos han sido los principales compradores, con el 29,92%; los marroquíes se sitúan en segundo lugar con el 15,32% y los chinos cierran el Top 3 con el 5,87%.
Zaragoza copa las operaciones
Dentro de Aragón, la ciudad de Zaragoza ha contabilizado 2.153 compraventas con un incremento trimestral del 4,1% y el 8% en el tercer trimestre de 2024, lo que refleja una subida del 25,6% en comparación con el mismo trimestre de 2023. En los últimos doce meses, han sido 7.961 compraventas, con una subida interanual del 8,6%.
Tras Zaragoza, se sitúa la ciudad de Huesca como la segunda capital con más dinamismo con 141 compraventas, produciéndose en este caso un descenso trimestral del 6,6%. No obstante, en 2024, se han registrado 660 compraventas, con una mejora interanual del 16,8%.
Finalmente, en el caso de Teruel, han sido 93 compraventas, con un ascenso trimestral del 1,1%. Unas cifras que se elevan a 384 compraventas si se tienen en cuenta los últimos doce meses, lo que arroja un crecimiento interanual del 0,8%.
A pesar de estos datos, las tres capitales de provincia han perdido peso relativo en la compraventa de viviendas en relación al total de las provincias. En concreto, la de Zaragoza concentra el 70,27% con 11.548 operaciones en los últimos doce meses, mientras que Huesca copa el 3.413 (el 20,77%) y Teruel un total de 1.473 (el 8,96%).
Mercado de alquiler
Frente al dinamismo del mercado de la compraventa, en el segmento del alquiler se observa que es un mercado que casi está en extinción porque "cada vez hay menos personas que acuden a las agencias a por un piso de alquiler", añade Fabra. Además, se ven menos anuncios de pisos en alquiler porque, ante la demanda, se cubren de forma prácticamente inmediata. "La demanda es más fuerte".
También hay una inseguridad jurídica que se ha generado en el mercado del alquiler, además de demonizarse al arrendador y propietario aunque, en Aragón, entre el 70% y el 80% tienen uno o dos pisos para complementar la pensión o los ingresos del hogar.
De hecho, no se observa que, en la comunidad aragonesa, se esté produciendo el fenómeno de las compras por fondos de inversión, dado que aquí es difícil encontrar el tipo de producto que buscan -normalmente un edificio completo-, aunque sí se percibe más interés de un inversor, de tipo particular, que vuelve a ver el ladrillo como un elemento de rentabilidad.