
Nueva alianza de calado en el sector residencial del alquiler. La gestora española Elix, capitaneada por Teresa Marzo, ha sellado un acuerdo con un fondo gestionado por CBRE Investment Management (CBRE IM) para impulsar una cartera de unas 1.200 viviendas asequibles y sostenibles en nuestro país.
Elix será la encargada de buscar, analizar y presentar oportunidades de inversión a CBRE IM, ajustándose a los criterios de inversión de la estrategia en materia de ubicación, tamaño, calidad, rentas asequibles y sostenibilidad y dará apoyo al fondo en todo el proceso de materialización de la compra de edificios, definición de estrategia de reposicionamiento de los activos en materia de ESG y en la posterior gestión de los activos.
"Esta alianza materializa el compromiso de Elix y CBRE IM para contribuir a aumentar el parque de vivienda asequible, sin olvidarnos del compromiso social, ambiental y de buen gobierno que es un pilar para ambas partes", explica Teresa Marzo, CEO de Elix.
Actualmente, Elix cuenta con más de 750 millones de euros en activos bajo gestión y entre sus principales inversores se encuentran entidades de primer nivel internacional y nacional como KKR o Altamar, además de ser la gestora de activos residenciales de alquiler en España de Allianz.
Según explica la compañía, su objetivo en el sector residencial es ambicioso, ya que tiene previsto levantar vehículos de inversión y gestionar más de 1.500 millones de euros en activos de residencial en alquiler en 2025.
Por su parte, CBRE IM cuenta ya con presencia en el segmento del alquiler residencial a través de una alianza con Azora. Además, la gestora de fondos explicó a elEconomista.es que tiene el objetivo de crecer en este segmento a través del vehículo European Residential Impact Fund, que cuenta con una capacidad de 3.000 millones de euros para invertir en ciudades europeas. Aproximadamente un 10% de este capital se destinará a España.
Hace apenas unos meses CBRE IM cerró la compra de un proyecto de alquiler BTR de Culmia en Badalona que cuenta con más de 200 pisos en una operación que rondó los 100 millones de euros.