
La escalada del euríbor, el índice al que están referenciadas la mayoría de hipotecas en España, parece no tener freno. Aunque ayer hizo una pausa en pleno rally y bajó por primera vez tras 13 jornadas consecutivas al alza, lo cierto es que lleva cuatro meses de avance y en junio ya se sitúa en torno al 1%, un nivel que no superaba desde el 23 de julio de 2012. ¿Cómo se traduce esto en las hipotecas?
La Asociación de usuarios financieros (Asufin) estima que el euríbor podría cerrar junio en ese 1% y su previsión para 2022 apunta al 1,5%. Según los cálculos de la asociación, de confirmarse esta subida supondría un sobrecoste en las hipotecas de 830 euros si se revisan ahora y de 1.127 euros en caso de hacerlo a finales de 2022.
En apenas dos años (desde que a finales de 2020 se alcanzó el mínimo histórico del euríbor negativo en el -0,5%), la subida proyectada es de un punto porcentual. Fue en abril cuando tocó terreno positivo por primera vez desde el año 2016.
De cara al año que viene, Asufin estima que el euríbor podría escalar al 1,9% en 2023, lo que sumaría un tipo de interés cercano al 3% en el supuesto contemplado de una hipoteca de 100.000 euros, a 25 años, con un 1% de diferencial.
En este escenario, recalcan la importancia de elegir la hipoteca a tipo fijo o variable, dado que la tendencia es el encarecimiento de un tipo fijo que se ha situado en los últimos tiempos en tasas históricamente bajas.
Según los datos recabados por el III Barómetro de hipotecas de Asufin, las hipotecas más económicas del mercado son las variables bonificadas, con un 2,30% TAE de media (0,05% menos que en julio), seguidas de las fijas bonificadas, con un 2,35% (0,01% menos que en julio). "Estos precios, no obstante, son solo bajos en apariencia, porque el coste global puede ser muy superior al incluir los productos que lleva aparejados, como seguros o ahorro/inversión", avisan desde la asociación.
Por el contrario, las hipotecas más caras son las que no bonifican por contratación de productos, siempre en medias TAE, y sin tener en cuenta el coste de los productos que contratan. Las variables sin vinculaciones suben al 2,68%, un 0,02% más que en julio, y las fijas sin vinculaciones se sitúan en un 2,84%, un 0,03% menos.