La línea 1 de Metro es la más antigua del suburbano de Madrid y, por eso, necesita de forma periódica trabajos de mejora que, unidos a las ampliaciones de otras líneas, provocan que de forma temporal se modifique el recorrido de la línea con la suspensión de varios tramos de paradas.
Es lo que ha pasado durante los últimos meses, en los que han coincidido dos sucesos a la vez: por un lado, las obras de ampliación de la línea 11 de Metro y, por otro, los trabajos de mejora y modernización de la línea 1. Pero, tras cinco meses de parón, toda la línea 1 vuelve a estar abierta.
Desde este mismo viernes 1 de diciembre se reabrirá a los usuarios la parada de Atocha, la única que quedaba cerrada desde que en verano comenzasen las obras de mejora que afectaron a la mitad de la línea, una de las más usadas de toda la red de la capital.
Esta reapertura se produce más de un mes después de que se reabriese el segundo y último tramo pendiente de apertura de la línea 1, el que unía las estaciones de Nueva Numancia y Valdecarros. Antes, el mes anterior, ya se había reabierto el tramo entre las estaciones de Sol y Nueva Numancia.
Sin embargo, la estación de Atocha había permanecido cerrada hasta ahora. A pesar de que los de modernización de la línea 1 ya habían finalizado, esta estación seguía sin acceso debido a las obras de ampliación de la línea 11, que en su nuevo recorrido tendrá conexión en esta estación dentro de su renovado camino, desde Plaza Elíptica hasta Valdebebas (aunque también se expandirá por el sur dirección Cuatro Vientos.
El objetivo de esta vía es proporcionar a los habitanes del sur de la ciudad una alternativa complementaria para llegar al centro de Madrid sin tener que recurrir a la línea 6, la más usada de toda la red de Metro.