
Todavía falta un mes para despedir el 2022, pero más de una compañía le habría dicho adiós hace tiempo. Es el caso de Meta, cuyo valor de mercado se ha reducido casi un 70% en un año-hasta los 297.610 millones de dólares- debido a las turbulencias que atraviesa el sector tecnológico y su apuesta personal por el metaverso. Ante esta situación, Mark Zuckerberg ha optado por "dejar ir" a más de 11.000 empleados. Sin embargo, por la red ha corrido el rumor de que quizás será él quien abandone la empresa en 2023. Aunque el mismo ya ha sido desmentido, ha sembrado la semilla para imaginar quién podría ser el nuevo CEO y qué rumbo tomaría la empresa.
La elección no sería sencilla, eso seguro. No obstante, hay unos cuantos candidatos sobre la mesa, entre los que podrían encontrarse los gemelos Winklevoss. A saber: Tyler y Cameron Winklevoss demandaron a Mark Zuckerberg en 2009 por haberles robado la idea de Facebook y le pidieron más de 100 millones de dólares como compensación. Dos años después, firmaron un acuerdo por el que recibieron 65 millones de dólares, parte de los cuales utilizaron para montar su propio negocio relacionado con las criptomonedas, la plataforma de criptointercambio Gemini y la correduría de activos digitales Genesis. Pese al drama, ambas partes hablaron en 2019 sobre la posibilidad de integrar las criptomonedas en las plataformas de Meta. Aún así, habría que esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos, ya que el colapso de FTX les ha afectado de lleno.
Otra opción podría ser Sheryl Sandberg, la que fuera directora operativa de Meta durante 14 años, hasta agosto de 2022. A su favor jugaría el hecho de que conoce en profundidad el negocio y ha sabido gestionarlo tanto en los buenos momentos como en los malos. Además, su vuelta no sería algo tan sorprendente. Esta misma semana, Disney ha anunciado la sustitución de Bob Chapek, CEO de la compañía desde 2020, por Bob Iger, su antecesor.
Sin olvidar a Chris Cox, el jefe de producto de Meta. Se incorporó a la compañía en 2005, lo que lo convierte en uno de sus miembros más antiguos. Aunque es cierto que abandonó la empresa en 2019 por diferencias con Zuckerberg en relación a la dirección de la misma, volvió a su puesto un año después y parece la opción más lógica para suceder al actual CEO, según Quartz.
En cuanto a las medidas que adoptaría el nuevo consejero delegado, es probable que una de sus primeras decisiones fuera reducir la financiación del metaverso. Desde noviembre de 2021, Meta ha gastado cerca de 10.000 millones de dólares en la unidad Reality Labs, centrada en el desarrollo de esos mundos virtuales. No obstante, los resultados no han sido los esperados y los usuarios parecen más interesados en todo lo relacionado con los juegos de realidad virtual (RV) de la empresa, que en Horizon Worlds, su red social de RV. Por ese motivo, es probable que la nueva dirección se centre en los primeros, dejando de lado proyectos como las gafas inteligentes. En ese sentido, también podría llevar a cabo la adquisición de un estudio de juegos, lo que le permitiría alimentar su plataforma metaversa.
En cualquier caso, no parece que Mark Zuckerberg vaya dejar de ser CEO de Meta en un futuro cercano. El principal motivo es que sigue siendo el accionista mayoritario de la compañía, con cerca del 58% de los títulos con derecho a voto. En la práctica, esto supone que no puede ser expulsado de su puesto.
En el plano personal, el 2022 tampoco ha sido un buen año para Zuckerberg. En septiembre de 2021, su fortuna ascendía a 142.000 millones de dólares. Doce meses después, esa cifra rondaba los 55.300 millones de dólares y, ahora, ni siquiera supera los 43.000 millones de dólares, según Bloomberg.