
Pese a que la inflación de los alimentos (del 4,4% en el mes de mayo) se ha moderado en los últimos meses, lo cierto es que la cesta de la compra sigue resultando cara. Es por ello que el Gobierno extenderá previsiblemente la rebaja del IVA sobre los alimentos, la cual concluirá al finalizar este mes de junio.
Una medida que, para muchos, ha resultado insuficiente o ineficaz. "Esta es una buena noticia, pero no basta. Sigue siendo necesario incluir en esta rebaja otros alimentos de primera necesidad, como la carne y el pescado, algo que desde OCU llevamos tiempo solicitando", señala la organización. Por su parte, desde Facua-Consumidores en Acción inciden en la ineficacia de la medida, ya que "los precios no han parado de subir en el último año y medio, en muchos casos con claros incrementos en los márgenes de beneficio".
Cabe recordar que, hasta ahora, se están aplicando diferentes bajadas de IVA.
- Del 4% al 0%: el pan, el pan congelado y la masa de pan congelada; las harinas panificables; la leche de cualquier especie animal (natural, certificada, pasteurizada, concentrada, desnatada, esterilizada, UHT, evaporada y en polvo); los quesos; los huevos; las frutas, verduras, hortalizas, legumbres, tubérculos y cereales.
- Del 10% al 5%: el aceite de oliva (virgen extra, virgen, aceite de oliva o de orujo de oliva), el aceite de semillas (girasol, soja, maíz o sus mezclas) y las pastas.
Las 5 claves para ahorrar
A la espera de ver qué medidas llegan, desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) facilitan a los clientes cinco consejos con los que ahorrar a la hora de hacer la compra en la medida de lo posible.
- Buscar variedades baratas. "Por ejemplo, el boquerón fresco en temporada ronda los 6 euros/kg, frente a los 13 euros/kg del salmón".
- Buscar productos de temporada. "En junio, por ejemplo, priorizar el melón, el melocotón, el albaricoque, las cerezas o las ciruelas".
- Buscar congelados. "Las verduras congeladas son un 44% más económicas que las frescas; y en concreto, las judías verdes, un 71%".
- Buscar marcas blancas. "Por ejemplo, la leche entera de marca blanca puede ser hasta un 26% más barata que una primera marca".
- Buscar productos en oferta por pronta caducidad. "En este caso el ahorro puede llegar al 50%, sin que OCU haya detectado problemas de calidad".