La marca insignia de AmRest en nuestro país, La Tagliatella, acaba de cumplir 20 años en los que ha logrado alcanzar los 230 restaurantes operativos, de los cuales 155 son franquiciados, lo que supone un crecimiento del 75% en la última década.
Tras haber logrado tener presencia en todas las Comunidades Autónomas y llegar a Portugal con cuatro locales, la enseña ha iniciado un plan de restyling de sus restaurantes y el lanzamiento de La Tagliatella Piccola, un nuevo formato de dimensiones más reducidas para facilitar su expansión a en localidades de menos de 50.000 habitantes que ha estrenado en Alicante. La responsable de Franquicias de la enseña, Angélica Rivera, analiza el momento de la marca.
¿Qué planes de crecimiento se plantea la marca para cada una de sus dos modalidades de restaurante este año?
El plan de crecimiento pasa por seguir abriendo tanto el modelo de tradicional como La Tagliatella Piccola, teniendo en cuenta la población y la ubicación. Este nuevo formato nos permite abrir en lugares donde La Tagliatella, con más de 220 restaurantes en toda España, no podría llegar.
¿Qué necesidades han llevado a la enseña a compaginar ambos modelos?
El formato Piccola nos permite abrir La Tagliatella en provincias y localidades con menos de 50.000 habitantes. Para conseguirlo, necesitábamos un modelo que requiriera de una menor inversión inicial.
La inversión para poner en marcha el modelo Piccola se sitúa alrededor de un 35% por debajo del tradicional
¿Su carta también es más reducida?
Con el objetivo de simplificar las operaciones en el restaurante, La Tagliatella Piccola tiene una carta mucho menor, alrededor de un 40% más reducida que el formato habitual, aunque los clientes podrán encontrar en ella los platos más demandados de nuestra cadena.
Es una versión pensada para facilitar su expansión solo bajo el modelo de franquicia o también se contempla mantener unidades propias de AmRest. ¿Qué inversión se necesita para abrir una unidad reducida?
Es un formato válido para ambos modelos, de hecho, ya tenemos algunas unidades; siempre nos gusta probar que un modelo funciona antes en nuestros propios restaurantes. Dependiendo del tamaño del local, la inversión necesaria para poner en marcha el modelo Piccola se sitúa alrededor de un 35% por debajo del restaurante tradicional.
¿Cuándo prevén alcanzar el 100% de restaurantes con su imagen cambiada y qué otros servicios o aspectos se han renovado?
Renovar 230 restaurantes es un proyecto a medio plazo. Además de la inversión necesaria, en cada caso hay que considerar también el tiempo de inactividad que supone este proceso de renovación para el restaurante, que estimamos entre dos y cuatro semanas, lo que implica una planificación muy cuidadosa para minimizar el impacto. Además, queremos asegurarnos de que la renovación siga manteniendo la esencia de La Tagliatella, que es muy marcada. En cuanto a la innovación en todos los puntos de contacto con el cliente, tenemos una apuesta muy fuerte en digitalización. Continuamos invirtiendo en innovación de producto, que es el alma de nuestra marca, y mejoramos continuamente nuestros canales de venta para llevar, tanto en delivery como take away. Como siempre, buscamos mejorar la experiencia de nuestros clientes en cada una de sus visitas.
Cuando La Tagliatella apareció hace ahora 20 años, la restauración organizada en España no era la misma, ¿cómo ha tenido que adaptarse la marca a la competencia en el segmento italiano y al crecimiento del sector en general?
Siempre hemos defendido nuestro modelo de negocio orientado a la calidad de producto, que mantenemos desde nuestro origen como marca, y la experiencia del cliente dentro del restaurante. La innovación, tanto en producto como en recetas, y mantener unos estándares altos de servicio es lo que nos sigue diferenciando para seguir siendo atractivos para nuestros clientes de toda la vida y para atraer a nuevos. Además, en los últimos años, también hemos realizado un gran esfuerzo en adaptar nuestra oferta y las operaciones a los nuevos momentos de consumo que nos demandan nuestros clientes, como son el delivery y el take away.
La innovación en producto y recetas, además de mantener unos estándares altos de servicio es lo que nos sigue diferenciando
¿Qué hitos destacaría en torno a la marca en estas dos décadas?
Sin duda, la integración en 2011 de una marca nacida en España como La Tagliatella en un grupo internacional de restauración como AmRest. Supuso el gran hito dentro de la historia de la marca y un gran cambio tanto en la visión como en la gestión de la enseña, lo que permitió acelerar su crecimiento. Un hito más reciente ha sido la apertura del mercado portugués, en el que actualmente disponemos de cuatro unidades y en el que tenemos previsto seguir creciendo en los próximos años gracias a la gran acogida.
La Tagliatella es una marca propia de AmRest, ¿piensa el grupo aplicar este modelo de diversificación de formatos a otras enseñas del grupo como Blue Frog, Sushi Shop o Bacoa? ¿Qué planes tienen para cada una de estas marcas?
Una de las grandes apuestas de AmRest para continuar con el crecimiento en España se centra en la marca Sushi Shop debido al alto potencial de este tipo de gastronomía y por ser un producto especialmente enfocado en el canal delivery. Prevemos crecer tanto en locales propios como a través de franquiciados que nos han comunicado su interés. Para la marca este será el año de empezar con la expansión en España tanto con locales propios como franquiciados.