El PSOE ha presentado este lunes un avance del programa social, una versión reducida, con el que concurrirá a la repetición electoral del 10 de noviembre, un texto que se cerró este domingo y que poco se distingue de aquel que dio a conocer a principios de septiembre para convencer a Unidas Podemos para que apoyara la investidura de Pedro Sánchez, algo que no ocurrió. En el acto, el candidato socialistas ha afirmado que subirá las pensiones en diciembre de acuerdo con el IPC real, aunque el Gobierno esté en funciones.
En este sentido, Sánchez, durante su intervención en la presentación del programa, ha asegurado que protegerá las cuentas de la Seguridad Social y gestará el "blindaje constitucional del sistema público de pensiones". Además, ha afirmado que "este mismo mes de diciembre actualizaremos las pensiones al IPC real". Todo bajo la presunción de ganar las elecciones, claro.
De esta manera, Sánchez da a entender que la aprobación de la subida de las pensiones se haría con el Gobierno todavía en funciones, puesto que es dudoso que se pueda haber formado gobierno con competencias plenas para antes de 2020. Es decir, que, tal y como indican fuentes de Moncloa, sí o sí se subirán estas prestaciones, tenga plenas competencias o no el Ejecutivo, contradiciendo al Ministerio de Trabajo en ello.
Consejos sectoriales
En el documento, al que ha tenido acceso elEconomista, se insiste en la progresividad de la fiscalidad, aunque sin concretar medidas como las subidas fiscales prometidas en el último año, y además los socialistas se comprometen a constituir consejos sectoriales de verificación, en los que participará la sociedad civil, para "evaluar el cumplimiento" de los compromisos del PSOE en, entre otras cuestiones, la reforma laboral.
Este fue, precisamente, uno de los compromisos que ofreció a Unidas Podemos a cambio de su apoyo en la enla investidura. De esta manera, el PSOE espera convencer a sus votantes de su compromiso, retomado, de derogar los aspectos más lesivos de la reforma laboral. Cabe recordar que en el último año los socialistas, sobre todo desde el Gobierno en funciones, ha dado pasos atrás en su intención de llevar a cabo la prometida reforma.
Copagos
Con todo, Sánchez no renuncia a uno de sus principales metas: elaborar un nuevo Estatuto de los Trabajadores que incentive la actividad económica y "el empleo digno". Además, si se mantiene en Moncloa, el PSOE promete impulsar un Ley de startups y trabajar con las CCAA para "eliminar los obstáculos a la actividad empresarial".
Además, se mantiene la promesa de la eliminación progresiva de todos los copagos farmacéuticos, empezando por el de pensionistas en situación de mayor vulnerabilidad y ampliar la cartera sanitaria del Sistema Nacional de Salud con la atención bucodental.
Cero emisiones
El PSOE insiste, así mismo, en establecer la universalización de la educación infantil para niños y niñas menores de 3 años, crear una autoridad de protección del cliente financiero e impulsar el coche eléctrico para llegar a cero emisiones "no más tarde de 2040", pero sin discriminar ninguna tecnología, evitando las críticas del sector del automóvil de septiembre.
Además, se compromete a abolir la prostitución y a poner en marcha un ingreso mínimo y a reducir en al menos un 75% las listas de dependientes.
Respecto a la Cataluña ha insistido en el "conflicto social" que vive la región y que la solución solo llegará a través de la legalidad y dentro de la Constitución. Finalmente, Sánchez ha cargado contra sus rivales políticos y el multipartidismo. "Ninguno tiene proyecto de país, ninguno tiene un proyecto para España". Y ha criticado: "¿De qué sirven tantos partidos políticos si no sirven para abordar los problemas sociales que tiene el país? ¿De que sirve que se multipliquen las siglas si no hay un gobierno estable y coherente que dé respuesta a las necesidades sociales del país?".