
El presidente y consejero delegado de Naturgy, Francisco Reynés, renuncia al bonus a largo plazo al que tenía derecho, según el sistema de retribuciones para los directivos de la empresa energética establecido en 2018. En términos más concretos, Reynés se abstiene del cobro aproximado de 12 millones de euros en un momento clave, cuando está ya sobre la mesa la posible opa del grupo emiratí Taqa sobre Naturgy. Con su paso atrás, el presidente de la empresa española asegura que, sea cual sea el desenlace de esa oferta, no tendrá consecuencias sobre su remuneración personal ligada al sistema de incentivos a largo plazos (aunque este protocolo seguirá vigente para el resto de directivos). Es un movimiento acertado que honra a Reynés y ataja toda posibilidad de conflicto de interés del presidente de Naturgy en la futura operación.
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