
El fondo inversor británico Trilantic, accionista mayoritario de Talgo, está inmerso en una negociación con la suiza Standler para venderle su participación del 40% en el fabricante de trenes español. Algo que pretendía ejecutar a través de la OPA grupo húngaro Magyar Vagón. Pero las reticencias del Gobierno a esta operación ha hecho que Trilantic active un Plan B para lograr su objetivo.
Con todo, lo más importante es que si fructifica esta venta, Standler tendría que lanzar una opa sobre Talgo, dado que la ley obliga a ello si se adquiere más del 30% del capital de una compañía.
La compra de Talgo, por tanto, entra en una nueva etapa en la que posible llegada de un caballero blanco, en este caso Standler, impulsaría el precio y contaría con el visto bueno del Ejecutivo.