
Tras entrar en su capital en 2006, el aeropuerto de Heathrow, en Londres, era la joya de la corona de Ferrovial. Pero ahora, la constructora vende su participación en esta infraestructura (25%) por 2.735 millones. Las razones de ello residen en que tras el Covid, Heathrow se había convertido en un problema, al acumular tres años sin repartir dividendos y afrontar la bajada de las tarifas que cobra a las aerolíneas. En este contexto, Ferrovial toma una decisión acertada. Algo que reconoce el mercado con un alza de casi el 2% en la sesión de ayer. Un impulso esperable ya que con la venta la compañía acumula 8.000 millones de liquidez para invertir en EEUU. Un país en el que Ferrovial espera cotizar y que es su primer mercado estratégico.