El incremento del precio del crudo y el alza que aún conservan los alimentos hace temer que el repunte que la inflación ha mostrado en agosto rompa la tendencia a la baja que venían mostrando los precios en EEUU y la UE. Pero según una encuesta realizada por elEconomista.es ese miedo es infundado. Muy al contrario, el 90% de las gestoras considera que el IPC aún no ha alcanzado un suelo pese al aumento del coste de las materias primas y el frenazo en las alzas de tipos de los bancos centrales. En otras palabras: los expertos estiman que el repunte será puntual, lo que es una buena noticia. No obstante, esto no significa que la inflación esté muy controlada. No en vano, el BCE considera que será en 2025 cuando se alcance un nivel normalizado en el entorno del 2%.
