
El fundador de Bridgewater, Ray Dalio, se muestra contundente en una entrevista en elEconomista al afirmar que "es imposible subir tipos para frenar la inflación sin que eso dañe al mercado y a la economía". Ni mucho menos se puede calificar su análisis de catastrofista.
Muy al contrario, la propia Fed se encarga de avalar esta tesis al reconocer que a medio plazo tendrá que bajar el interés hasta el 2%-2,5% frente al 3,5-4% en el que el organismo prevé que estará entre 2022 y 2023. Lo mismo estiman los mercados, con las recientes caídas. Como ha ocurrido a lo largo de la historia, las bolsas ya descuentan la amenaza que para el crecimiento económico en 2023 y 2024 suponen las alzas de tipos. Esta anticipación es una clara señal de riesgo de recesión.