
El Ministerio de Justicia permitirá que los juzgados mercantiles se especialicen sólo en concursos de acreedores. Este cambio tiene gran importancia para que sea exitosa la reforma proyectada en dichos concursos.
Hasta ahora estos procedimientos no son más que el preámbulo de la desaparición de las empresas que los solicitan, ya que en ellos apenas encuentran ayuda para reestructurarse y seguir operando.
En parte, esa realidad se explica por la nula agilidad de los juzgados mercantiles, sobrecargados con todo tipo de causas, desde las demandas por cláusulas abusivas hasta reclamaciones en materia de transporte.
El hecho de que ahora puedan centrar toda su atención en los concursos brindará un valioso auxilio a muchos negocios viables ahora en apuros.