Pese a perder 174 millones en el trimestre, los títulos de Siemens Gamesa subieron casi un 4% ayer. Esta paradoja se explica por el acuerdo alcanzado por Siemens con Iberdrola para hacerse con la participación de la eléctrica en Gamesa. La operación es positiva por varios motivos.
Incluye el compromiso de mantener la españolidad de Gamesa en un momento en el que la alemana Siemens estudia agrupar todas sus participaciones energéticas en una empresa que sacará a bolsa. Pero más importante es que el pacto pone fin al largo enfrentamiento que Iberdrola mantiene con Siemens por sus profundas discrepancias de gestión, y que llegó a los jueces. La expectativa de que el litigio no pasará a mayores brinda la estabilidad que Gamesa necesita para impulsar su negocio.
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