Opinión

MásMóvil y el futuro de las operadoras

La irrupción de MásMóvil ha trastocado el sector de las telecos

Recientemente hemos sabido que MásMóvil ha cerrado el año como la operadora que más ha crecido en España con 1,4 millones de nuevas líneas, 9 millones de líneas en total. Todo esto en pleno revuelo por los rumores de que la empresa está estudiando comprar Vodafone España y tras haberse incorporado el pasado verano al Ibex.

La cuota ha sido siempre una de las obsesiones principales de las telecos y no cabe duda de que en MásMóvil emprendieron hace unos años el camino hacia la cumbre no solo con estrategias comerciales sino, sobre todo, con estudiadas compras que les han permitido crecer de forma más rápida, y también con la incorporación en su cartera servicios que no tenían: por citar algunos ejemplos, Yoigo aportó la TV, UppTalk y UppMobile trajeron la voz digital (VoIP) y Neo la red 4G, entre otras muchas adquisiciones.

Pero a pesar de este fuerte crecimiento, la empresa sigue siendo la cuarta en discordia tras Telefónica, Orange y Vodafone a mucha distancia de esta última. Es por eso que el único movimiento que puede cambiar la foto sustancialmente y situar a MásMóvil en la cima es la de una compra corporativa. Y Vodafone es el candidato más accesible. ¿Pero qué hace que estemos hablando de una situación teóricamente antinatural en la que el pequeño compra al grande?

El crecimiento en volumen no será el único factor que los accionistas premien en el sector

Uno de los factores clave es, sin duda, la estrategia a largo plazo que hace cinco años (probablemente antes) definieron los socios de Ibercom y MásMóvil en el momento de su fusión. Estaba claro que el camino no terminaba con ese movimiento, sino que, como se dieron prisa en avisar, era el primer paso de su ambicioso plan de crecimiento del que muchos, por cierto, se reían en su momento. En ese camino se contempló entre otras cosas dotarse de capital suficiente para completar compras y crecer de manera no orgánica.

Algo que quizás no era tan fácil de ver en ese momento era la debilidad con la que iba a llegar Vodafone España a este momento. Sea por suerte o por visión, lo cierto es que la situación de la filial española de Vodafone está lejos de ser buena. Siendo uno de los grandes jugadores, siempre ha parecido ir a remolque de las demás operadoras y no ha ofrecido un plan a largo plazo con una visión de futuro clara (al contrario que MásMóvil), centrándose en la lucha comercial por la cuota y en replicar y contrarrestar los movimientos de la competencia.

Sin embargo, además de la posible compra de Vodafone España, que no dudo que se está negociando pero es incierta por su complejidad, cabe una nueva cuestión: ¿qué le queda a MásMóvil por hacer? El pasado verano dio el salto a Portugal adquiriendo participaciones en operadoras locales y dispone de más oportunidades de diversificación internacional, sobre todo ahora que Telefónica parece que "baja el ritmo" en Latinoamérica. ¿Pero será esto suficiente para empujar aún más el valor de la acción de MásMóvil? Y, sobre todo, ¿qué horizonte más allá del crecimiento de abonados tiene la operadora?

Llegados a este punto, cabe una reflexión más amplia sobre el futuro de las operadoras. Telefónica, de manera acertada al menos sobre el papel, ha anticipado algunas de las tendencias futuras que veremos: su papel en la nube y, por extensión, la virtualización de las propias redes, Internet de las cosas, 5G, los datos y la inteligencia artificial, entre otros, cobran vital importancia para redefinir los servicios y el valor para los usuarios de una operadora de telecomunicaciones.

Lo que está claro es que en el sector nos esperan muchos movimientos futuros y las reglas del juego se complicarán cada vez más, por lo que es probable que se mida a los operadores con nuevas varas de medir de las que aún no tenemos las reglas definidas.

En este sentido no está tan clara cuál es la visión de MásMóvil y cómo está diseñando su estrategia para navegar en esos futuros posibles. Me atrevo a anticipar que seguiremos viendo más compras y anuncios importantes, pero tendremos que esperar para saber si serán los adecuados para afrontar los próximos años, pues muchos de los retos aún no se conocen y el crecimiento en volumen no será el único factor para aportar valor a los accionistas.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky