Apax y Apollo ya han remitido sus ofertas por la filial de Servicios de Ferrovial, por unos 2.500 millones. En cambio, Brookfield y Platimun, los otros fondos que estaban en liza, aún no lo han hecho. Aunque eso no quiere decir que se hayan retirado definitivamente de la carrera por adquirir la división.
El interés que esta venta ha despertado en los fondos internacionales refleja el acierto de Ferrovial al sacar del paquete de venta a su división británica de Servicios (Amey) por su contencioso (ya solucionado) con el Ayuntamiento de Birmingham. La rapidez de reflejos que Ferrovial mostró al excluir a la filial del perímetro de desinversión es precisamente lo que ahora permite a la firma tener bien encaminada la operación del año en Europa.
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