
En el mundo hay dos clases de personas. Por un lado, están quienes quieren un vehículo sencillo que les lleve de un sitio a otro sin dar problemas y sin tener que gastar demasiado dinero. Por otro lado, hay personas que aspiran a comprar un coche de lujo porque son amantes del motor y buscan exclusividad, comodidad y satisfacción cada vez que conducen.
Sin embargo, invertir miles de euros en un coche es un arma de doble filo porque cada mala experiencia al volante puede salir muy cara. Y si no que se lo digan a un hombre ucraniano que se hizo con un Bentley Bentayga valorado en más de 250.000 euros y al día siguiente lo destrozó al volver de una fiesta.
Un accidente con dos mujeres y un perro
Según cuenta Telegraf, un hombre residente en Kiev, capital de Ucrania, se hizo con un vehículo de lujo y movido por la emoción decidió ir a celebrarlo. Después de pasar un rato en un club de la ciudad, el propietario y su amigo se subieron al Bentley en estado de embriaguez, lo que hizo que al poco de arrancar la marcha el conductor perdiese el control y se chocase contra un árbol.
Por si fuera poco, los dos hombres no iban solos en el Bentley. Junto a ellos viajaban dos mujeres y un perro. Los testigos de los hechos aseguran al Telegraf que el coche derribó el árbol y volcó por completo, pero que por suerte todos los pasajeros salieron ilesos del accidente. Eso sí, el perro huyó asustado.
Una de las cosas más sorprendentes de esta historia es que el conductor del Bentley ni siquiera se dio cuenta de lo que había pasado y preguntó "¿quién conducía?". La alegría de haber comprado el coche que tanto deseaba le duró tan poco que la matrícula todavía no se había introducido en la base de datos.
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