Desde 1977, a través de 40 ediciones, las carreteras italianas se llenan de joyas de 4 ruedas, vehículos clásicos anteriores a 1957. La 1000 Miglia es todo un espectáculo.
Del 13 al 17 de junio más de 400 vehículos históricos, anteriores a 1957 han recorrido más de 2000 km por las carreteras italianas en el que sin duda es el evento por excelencia del coche clásico, la 1000 Miglia. Allí, a lo largo de los cinco días de la prueba, los vehículos más legendarios de Bugatti, Mercedes, Porsche, Ferrari, Maserati o Jaguar han hecho disfrutar a miles y miles de italianos que han salido a las calles para vivir la fiesta del automóvil.
Esta es una carrera que se celebra cada año con salida desde Brescia, en el norte de Italia, que recorre algunas de las zonas más bonitas de la geografía italiana llegando hasta Roma y volviendo nuevamente a Brescia. Es una prueba de regularidad en la que no prima la velocidad máxima sino llegar a la hora exacta a cada control. Pero es la herencia de una carrera de verdad que, sin duda, ha sido una de las más importantes de la historia.
Un recorrido contrarreloj
Se habla mucho del Rally de Montecarlo, de las 500 Millas de Indianápolis o de las 24 Horas de Le Mans, pero la 1000 Miglia es igual de importante pero menos conocida. Fue una carrera que se disputó entre 1927 y 1957, hasta que fue prohibida por las autoridades italianas. Durante esos años los coches oficiales de las marcas más importantes, Ferrari, Alfa Romeo, Mercedes... hacían un recorrido contrarreloj por toda Italia.
Lo hacían con las carreteras abiertas al tráfico, pero a la máxima velocidad. Era una verdadera locura porque los coches corrían cada día más. El récord de la prueba lo logró Stirling Moss al volante de un Mercedes SLR con una velocidad media de 157,6 km/h después de recorrer 1.597 km. Cada año, en esa fiesta del automóvil de carreras en Italia fallecían espectadores y también pilotos.
La 1000 Miglia, como carrera, acabó en el año 1957, cuando el español Alfonso de Portago, al volante de un impresionante Ferrari, sufrió un gravísimo accidente. Circulaba a más de 250 km/h por un tramo recto pero un reventón de una rueda provocó un grave accidente. En este lance de la competición fallecieron 10 espectadores, además del propio Portago y su copiloto. En consecuencia, las autoridades italianas prohibieron que se volviera a disputar esta carrera. Pero todavía se hizo tres veces más en forma de pruebas de regularidad, pero ya con muy poco éxito.
Veinte años después del fin de la original Mille Miglia, y también organizada por el Automobile Club de Brescia, se hizo la nueva 1000 Miglia, en esta ocasión solo con pruebas de regularidad, y nunca de velocidad máxima. La participación ha estado siempre muy limitada. Solo pueden tomar parte vehículos anteriores a 1957 y modelos que hayan tomado parte en alguna edición de la clásica Mille Miglia.
La carrera, limitada a clásicos de verdad
De hecho la organización limita la inscripción y hace un completo seguimiento de los vehículos para que sean clásicos de verdad, originales, sin mejoras mecánicas. Este año se dio el visto bueno a 405 participantes con vehículos de todas las marcas incluyendo las más legendarias, Bugatti, Mercedes, Porsche, Alfa Romeo, BMW y, por supuesto, Ferrari. Pero también otras marcas menos conocidas, como Itala, OM, Osca...
Por todo ello, es una verdadera fiesta del automóvil clásico, que levanta pasiones a su paso. Además, es una fiesta multinacional. De los 405 participantes, nada menos que 121 son llegados desde los Países Bajos mientras que la tercera nacionalidad más presente es la estadounidense, que tiene nada menos que 65 equipos participantes. Alemanes, belgas y británicos superan los 50 equipos cada uno.
Más de 2000 km de recorrido en la 1000 Miglia
Este año, la 1000 Miglia tenía el recorrido más largo de su historia, más de 2000 km, en una carrera que discurre entre Brescia y Roma para volver a Brescia, después de pasar por alguna de las regiones más famosas de Italia. El lago di Garda, Verona, Ferrara, Imola, San Marino, Módena o Milán para, tras pasar por Bérgamo, finalizar nuevamente en en Viale Venezia, de Brescia.
A lo largo de esta semana automovilística, todas las ciudades italianas se engalanan y se preparan para ver pasar esta caravana maravillosa de coches históricos. La carrera está patrocinada por la compañía relojera suiza Chopard, que lleva 36 ediciones como sponsor principal y cronometrador de la carrera. La aportación de la compañía relojera viene de la gran afición de su copresidente Car Friedrich Scheufele, en la que será su 35 participación en la prueba. El piloto del equipo será Jacky Ickx, el ganador de seis ediciones de las 24 horas de le Mans. Ambos participan al volante de un impresionante Mercedes 300 SL alas de gaviota.
Aunque es lo menos importante de un evento como este, la victoria ha sido para Andrea Vesco. El italiano ha logrado de esta forma su cuarta victoria consecutiva en la prueba, pilotando un impresionante Alfa Romeo 6C 1750 SS Zagato de 1929 que ha superado en la meta a dos Lancia Lambda Spider Tipo 221, respectivamente de Gianmario Fontanella y de Andrea Belometti. El mejor equipo femenino fue el formado por Silvia Marini e Irene Dei Tos, a los mandos de un Bugatti T40 de 1929.
Un Maserati sin conductor en la 1000 Miglia
La legendaria prueba italiana es sinónimo de coches clásicos y de competición anteriores a 1957. Pero en esta edición ha sorprendido la presencia de un espectacular Maserati MC20 Zielo de 2021. Este coche moderno ha recorrido todo el itinerario de la prueba, realizando algunos tramos sin un conductor al volante. Es un desarrollo del politécnico de Milán en colaboración con Maserati y la organización de la 1000 Miglia.
Para cumplir con los requisitos de la autorización para poder circular sin conductor, el vehículo ha estado siempre supervisado por un copiloto humano. Se trata de Matteo Marzotto, un experimentado piloto que ha participado en numerosas ediciones de la histórica 1000 Miglia. Además, ha celebrado de esta manera el 70 aniversario de la victoria de su tío, Giannino, en la edición de de 1953. Este ha sido solo el primer paso de un ambicioso proyecto, poder hacer el recorrido completo de la legendaria prueba en modo autónomo en la edición de 2024.