Valencia
El mayor recorte de empleo de una empresa en la Comunidad Valenciana en la última década empieza a materializarse. Tras reunirse con la inspección de Trabajo, desde hoy empiezan a formalizarse las bajas indemnizadas previstas en el acuerdo entre Ford y el sindicato mayoritario UGT para el expediente de regulación de empleo (ERE) que afecta a 1.124 personas.
Según ha informado la representación de UGT, el fabricante de automóviles prevé alcanzar el 50% de las salidas pactadas antes de las vacaciones de verano en la factoría, que se realizan en agosto, aunque este año también hay varios días previos en julio en los que se ha programado el actual Erte en vigor.
El ERE supondrá reducir la plantilla de la factoría de Almussafes en casi un 20%, hasta unos 4.700 empleados para afrontar la desaparición de todos los modelos que venía fabricando hasta ahora salvo el Kuga y a la espera de que Ford anuncie que vehículos eléctricos asigna a Valencia para ensamblar a partir de 2026.
Las condiciones
La previsión es que el proceso de salidas concluya en el mes de diciembre. Para lograr el acuerdo, durante las negociaciones Ford rebajó hasta las 53 años la edad de los empleados que se podrán acoger a prejubilaciones.
Además, Ford también ha incrementado las indemnizaciones propuestas a las personas de menos edad que se acojan voluntariamente a este programa antes del 30 de junio. Así, ha doblado de 20.000 euros a 40.000 euros la indemnización adicional si se adhieren antes de esa fecha, mientras que pagará 20.000 euros a los que lo hagan también con posterioridad.
La factoría valenciana ha justificado este recorte por el final de dos de los cuatros modelos que actualmente ensambla Almussafes, el S-Max y el Galaxy. Dos coches que representaban menos del 7% de la producción de la factoría y que se abandonan por su cada vez menor demanda en Europa.
Además, en los próximos meses Valencia también se despedirá de la Transit Conect y sólo mantendrá la fabricación del Kuga. Una situación que se debería mantener hasta 2026, cuando esta previsto que Almussafes empiece a producir los nuevos modelos eléctricos de la plataforma asignada a la planta española en detrimento de la alemana de Saarlouis, cuyo futuro amenaza con el cierre.