
Han pasado más de ocho años desde la última vez que los analistas del consenso de mercado recomendaron como estrategia adquirir los títulos de Telefónica. Si bien la compañía se conforma desde noviembre de 2014 con un consejo de mantener, bien es cierto que esta situación está más cerca de revertirse a tenor de la mejora que está experimentando su recomendación, apoyada en la estabilidad de su dividendo y el control del desapalancamiento.
En concreto, de las 16 casas de análisis recogidas por Bloomberg que han revisado su valoración sobre la firma que dirige José María Álvarez-Pallete desde que arrancó mayo, siete han emitido o reiterado una recomendación de compra y elevado su precio objetivo entre los 9 y 12 euros, muy por encima del precio justo que le otorga el consenso de FactSet en los 8,8 euros, y que a precios actuales representa un potencial superior al 19%.
El sector de telecomunicaciones, uno de los más favorecidos por la caída en los intereses de los bonos -tanto por reducir el coste de financiación de sus elevadas deudas como por reforzar el atractivo de sus políticas de dividendo- no está aprovechando en bolsa el contexto de mercado actual, con la mitad de la deuda soberana de la Eurozona ofreciendo un interés negativo.
El carácter deflacionista de la industria, con una alta intensidad de inversiones y bajos retornos, está pasando factura a las telecos en el parqué, donde son el sector europeo más bajista, con una caída del 1,2%, frente al 11% que retrocede el Stoxx 600. En este sentido, es el sector el que está lastrando en bolsa a la firma española, que pese a todo, logra una subida del 0,7%.
"Telefónica ya ha visto la luz al final del túnel y las noticias son positivas para el valor, pero se está viendo castigada por las subastas de espectro para el 5G, que crean mucho ruido mediático y que en temas de valoración no representan tanto", señala Eduardo García-Argüelles, de GVC Gaesco-Beka.
Revisión de beneficios al alza
Prueba de ello es la revisión al alza de sus previsiones de beneficio desde que arrancó enero. La estimación de ganancias esperada para los próximos años se ha incrementado un 2% para 2019, un 4% para el año que viene, y un 21% de cara para el siguiente.

Una situación que contrasta con la de las 10 grandes firmas del sector -donde de media, el beneficio esperado se ha recortado un 8 y un 7% para los dos próximos años, y un 5 % para el siguiente- y del EuroStoxx 50, donde Telefónica es la única española, junto a Iberdrola, cuyas ganancias estimadas están escapando a la tijera de los analistas.
Con los fundamentales en la mano, cabe preguntarse qué están viendo los expertos, y no tanto los inversores, para mejorar sus perspectivas. "La actividad muestra buenas tendencias. Los ingresos consiguen crecer en España. Reino Unido continúa fuerte. Las perspectivas para Brasil mejoran y la apuesta por la distribución de contenidos funciona. El balance sigue reforzándose y la deuda neta cae por séptimo trimestre consecutivo", destacan desde Bankinter.
En opinión de García-Argüelles, se está premiando el proceso de desapalancamiento en el que está embarcada la firma, su fortísima generación de caja -superior a la de sus comparables-, unos resultados mejor de lo esperados y la salud de los mercados que le reportan el mayor porcentaje de su ebitda.
Respecto a la otra preocupación del mercado, el apalancamiento de Telefónica se ha centrado en reducir su deuda de manera orgánica además de haber vendido activos no core. "Con un coste de la deuda por debajo del 3,5%, y un 70% ligada a tipo fijo mediante múltiples emisiones de bonos, no pensamos que tenga urgencia por disminuir la deuda por vía inorgánica", añade el analista de GVC Gaesco-Beka.
El mejor comportamiento de las estimaciones de ganancias tiene otras derivadas, como el descuento del 28% que arroja Telefónica frente a sus comparables del Viejo Continente. Por PER (número de veces que el beneficio está recogido en el precio de la acción), el multiplicador de beneficios de la española se sitúa en las 10,5 veces, muy inferior al que el inversor está pagando por la holandesa Royal KPN -superior a las 25 veces), la noruega Telenor o la francesa Vodafone, por encima de las 17 veces.
En lo que llevamos de ejercicio se paga por los títulos de Telefónica una prima del 3%; no obstante, sus títulos se compran con un descuento del 33% respecto a su media histórica en las 15 veces. Asimismo, la firma también ofrece, en términos de deuda/ebitda (capitalización más deuda entre el beneficio bruto), la mayor rebaja del sector desde hace más de cinco años, en concreto, del 18%. Telefónica se compra a una ratio de cinco veces frente a las seis veces a las que lo hace el resto de 'telecos'.