Marzo va camino de convertirse en otro mes negro para la industria de la inversión, si la tendencia de flujos netos no cambia en estos días. Según la consultora VDOS, hasta el día 21 de este mes se han producido 2.133 millones de euros de reembolsos netos, una cifra cercana a los 2.338 millones que salieron en diciembre del año pasado. Entonces las caídas bruscas de los mercados justificaban gran parte del miedo de los inversores. Justo lo contrario de lo que está ocurriendo ahora, aunque todavía las bolsas se están recuperado de sus pérdidas.
Pero la desconfianza se ha apoderado de unos inversores que salieron escaldados de un 2018 tortuoso en rentabilidad y ni los fondos monetarios ni los de renta fija se libran de tener salidas de dinero, por el momento. De hecho, son las categorías con más reembolsos netos hasta el 21 de marzo, con 745,8 millones y 700 millones de euros respectivamente. Y eso que los fondos monetarios habían conseguido convencer a los partícipes más conservadores.
El Caixabank Monetario Rendimiento, por ejemplo, terminó febrero como el fondo con más entradas de dinero, con 734,4 millones netos. Hasta los fondos mixtos han seguido sufriendo en sus carnes el miedo de los inversores, aunque en menor proporción que en meses anteriores, con tan solo 156 millones netos esfumados por el momento.
Solamente los fondos garantizados, con casi 106 millones de euros de suscripciones netas, han conseguido atrapar el interés de los ahorradores ultradefensivos, aquellos que se conforman con cualquier rentabilidad a medio plazo por nimia que sea, lo que indica que el elemento de la garantía se ha convertido en un fuerte gancho comercial para las entidades financieras.
Este desapego de los inversores hacia los fondos tiene su traslación en las categorías de renta variable, donde las cifras de reembolsos netos han superado a las que se produjeron en diciembre del año pasado. Si aquel mes se esfumaron 353,7 millones, hasta el 21 de marzo se han evaporado 357,8 millones de euros netos.
Si se desagrega esta cifra por zonas geográficas, se comprueba que los inversores recelan de las bolsas española y europea, categorías que han visto salir 183 y 301 millones de euros en reembolsos netos en marzo hasta el día 21, según VDOS. En cambio, los fondos de renta variable americana y global han experimentado entradas netas de dinero por valor de 183 y 301 millones de euros.
Es significativo porque los fondos de bolsa española habían permanecido hasta la fecha constantes en su flujo positivo de captaciones, mientras que los fondos de bolsa europea habían sufrido ya en febrero salidas por valor de 587 millones.
A pesar de estos datos, el patrimonio de los fondos apenas se ha resentido desde principios de año, gracias al buen comportamiento bursátil. De esta forma, han conseguido alcanzar 266.470 millones de euros de patrimonio, un 2,5% más del volumen con que cerraron en diciembre de 2018, gracias a los 6.644 millones de revalorización de las carteras por puro efecto de los mercados. Este horizonte complicado para los fondos se produce cuando la directiva Mifid II está plenamente operativa y obliga a explicitar los gastos de los productos financieros.
