
Aprovechando el programa de compras de activos del Banco Central Europeo, las compañías de la eurozona han refinanciado durante los últimos años el grueso de su pasivo. Ahora con el QE dando sus últimos coletazos en el final de 2018 y con una subida de tipos puesta en calendario en septiembre 2019, las empresas no financieras de la región afrontan vencimientos de deuda, préstamos y líneas de crédito por 376.000 millones de euros, según los números de Standard & Poor's.
Según datos de FactSet y Bloomberg, las firmas del Ibex 35 -excluyendo a los bancos- afrontan vencimientos de deuda de 3.844 millones en lo que resta de año y de 13.731 millones en 2019. En este contexto, son 4 las compañías del índice español de referencia que verán vencer al menos el 25% de su pasivo antes de que acabe 2019: Siemens Gamesa, Acerinox, Amadeus y Dia. Además, ACS y Repsol afrontan el vencimiento del 15%.
En todo caso, no todas atraviesan ahora la misma situación. Siemens Gamesa cuenta con caja neta, Repsol y Acerinox tienen niveles de endeudamiento históricamente bajos. Mientras, ACS y Amadeus acaban de acometer dos operaciones que han empeorado ligeramente sus ratios de endeudamiento -aunque no de manera preocupante- y es Dia la que atraviesa una situación más cruda. Eso sí, todas verán cómo el apoyo del BCE se reduce. "La entidad ha sido una fuente considerable de demanda en 2018, comprando entre el 50 y el 70% de las emisiones netas no financieras. A pesar de que las compras han caído, el impacto no ha bajado porque la oferta también ha cedido, pero para que la rebaja en las adquisiciones a partir de octubre -de 5.000 a 2.500 millones- no se notase se requeriría que la oferta cayese más, lo que pensamos que es improbable", explican en UBS.
Los mayores vencimientos
Así las cosas, el foco del mercado está puesto en Dia. Durante el año 2017 logró una financiación récord a largo plazo al emitir 300 millones de euros con un vencimiento a 6 años y un cupón del 0,375%. En julio de 2019, la distribuidora afrontará el vencimiento de una emisión de 300 millones del 2014 con un cupón del 1,5%. Con la complicada situación que afronta la empresa, la rentabilidad de la deuda en el mercado secundario no ha parado de escalar desde mínimos de febrero de 2017 a pesar de que cada vez queda menos para el vencimiento, pasando del 0,07% al 0,62%.
Si la situación no cambia sustancialmente -está pendiente de presentar un nuevo plan estratégico y hay rumores de una posible opa de Fridman, que controla el 29% del capital- cuando la compañía acuda al mercado se financiará mucho más caro que en 2017. Su último bono ofrece una rentabilidad del 2,625% frente al cupón inicial del 0,875% un año y medio más cerca de su vencimiento. "La calidad crediticia de Dia está restringida por su tamaño medio, su aumento del apalancamiento y su riesgo por la exposición por países y divisas debido a Latinoamérica", explican desde Moody's.
Otra compañía que afronta vencimientos importantes de deuda en los próximos meses es Amadeus. La compañía cuenta con varios récord de financiación en su haber, pero la última compra de Travelclick por 1.500 millones de dólares ha apretado su posición financiera, si bien en ningún momento ha puesto en riesgo su calificación crediticia. "Aunque esperamos que Amadeus experimente de manera temporal unas métricas crediticias más débiles por su adquisición, creemos que su negocio general saldrá fortalecido. Además, esperamos que se desendeude rápidamente hasta su objetivo ajustado a nuestras métricas de 2 veces deuda/ebitda", explican desde S&P.
La tecnológica verá como el año que viene vencen 1.000 millones de euros de deuda, el 36% de su pasivo. En este sentido, Francisco Urbano, Director Group Treasury & Corporate Finance en Amadeus IT Group, admitía en los premios de Inversión a Fondo de elEconomista que tras diez años de caídas de tipos de interés "probablemente sea tiempo de reequilibrar la relación entre inversores y emisores aunque tengamos que pagar un poco más". Así las cosas, queda en el aire la segunda parte de su programa de recompra de acciones: la compañía tenía comprometidos 1.000 millones para buybacks, pero hasta 500 millones eran cancelables en caso de que la compañía lo requiriese.
Otra firma que ha cambiado su estructura financiera en los últimos meses ha sido ACS tras la adquisición conjunta de Abertis después de años de reducción de deuda. Según datos de FactSet, la compañía afronta vencimientos de 430 millones de euros de aquí a fin de año y de 735 millones en 2019. Asimismo, en 2020 tendrá que reintegrar 1.368 millones de euros, con lo que en el periodo 2018-2020 vence una tercera parte de su pasivo. "Pensamos que las métricas de crédito se debilitarán de manera temporal este año como resultado de la caja usada para adquirir su participación en Abertis y que se recuperarán en 2019 y 2020 cuando el grupo empiece a recibir dividendos de la concesionaria", señalan en S&P.