
El Ibex afronta la recta final del año con el potencial más tibio de Europa. Los expertos del consenso que recoge Bloomberg dan al indicador un recorrido del 8,2% de cara a los próximos 12 meses, la mitad del que otorgan al italiano Footsie Mib (que roza el 17%) y también lejos del 11% del EuroStoxx. El recorrido del selectivo español hasta su precio justo -los 9.786 puntos- es también más reducido que los del francés Cac 40, el Stoxx 600 y el Dax alemán. Para lograrlo necesita el apoyo de la banca y, aunque hasta ahora ha contado con él, cuatro entidades ya están sobrevaloradas.
El índice de referencia en nuestro país ha agotado buena parte de su recorrido, ya que ningún homólogo del Viejo Continente ha corrido tanto desde que los británicos votasen sí al Brexit a finales de junio. Desde aquella decisión, que pilló por sorpresa a los mercados, el Ibex sube un 18,2%; también fue el que más se resintió del resultado del referéndum, al dejarse un 14% en dos días. El segundo índice europeo que más se revaloriza desde la consulta en Reino Unido es el Dax, que avanza un 13,6%.
El Ibex 35 cerraba este martes en los 9.040,7 puntos tras retroceder un 1,12% al contagiarse -como el resto de plazas europeas- del pesimismo de Wall Street, donde el S&P 500 cedió un 0,7%, a niveles de julio. Varios factores lo lastraron, especialmente la reunión de la Reserva Federal y el estrechamiento de la brecha entre los dos candidatos a las presidenciales, Hillary Clinton y Donald Trump.
También pesó en Estados Unidos la publicación de un decepcionante dato del gasto en construcción, que cayó un 0,4% en septiembre cuando se esperaba un repunte del 0,5%. En el otro lado de la balanza, se hizo público un ISM manufacturero que batía las previsiones al subir de 51,5 a 51,9.
Esperando las subidas
Desde el punto de vista técnico, el Ibex 35 perdió el soporte que tenía en el 9.100, cuya cesión, según explica Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, el portal de inversión de elEconomista, no cambia nada: seguimos en una fase de consolidación previa a nuevas subidas, que llevarían al Ibex 35 a ponerse en positivo en el año. "El índice lleva seis sesiones consolidando posiciones y este martes perdió un soporte de muy corto plazo, lo que sugiere que la consolidación es algo más amplia de lo que pensábamos; pero se trata de una fase que precede a unas alzas que entendemos que se dirigirán a atacar los máximos del año", explica el analista.
Para ponerse en positivo en 2016 y recuperar los 9.544 puntos, el Ibex deberá subir un 5,6%. ¿Hasta dónde puede caer el índice antes de embestir esos altos? "Por debajo de los 9.100 puntos, todo apunta a que podría buscar los 8.900-8.980 puntos; desde ahí consideramos muy probable que se retomen las alzas", añade Cabrero.
Que el índice español reconquiste o no esos máximos depende, fundamentalmente, del empuje de la banca, el sector con más peso en el selectivo y el que ha tirado de él desde el Brexit: CaixaBank, BBVA, Santander y Bankia se anotan desde entonces subidas superiores al 33%. Pero las entidades ya han agotado buena parte de su potencial y la mayoría de ellas están sobrevaloradas. Sólo Popular, Sabadell y Bankia tienen recorrido en bolsa, según las previsiones del consenso que recoge FactSet: del 30, del 12 y del 5,2%, respectivamente.
Popular, el valor con más potencial del Ibex 35, perdió el lunes el euro por acción y siguió cotizando por debajo de ese nivel. Ello, después de su desplome del pasado viernes, cuando se hundió más de un 8% tras anunciar un beneficio trimestral de 94 millones, un 66% inferior al del mismo periodo del año anterior.
Dia es la segunda con más potencial -tiene un recorrido del 27%- y en tercer lugar encontramos a IAG, con un 23%. Ambas lucen sendos carteles de comprar por parte del consenso de mercado que recoge FactSet, mientras que Popular, por el contrario, recibe un vender de forma ininterrumpida desde hace un lustro.
El sector financiero empieza a atraer, de nuevo, el interés de los expertos. JP Morgan incluyó a Santander entre sus preferencias dentro de la banca europea, tras señalar que mantiene su interés en "acciones con dividendos de calidad" en un entorno "de limitado potencial alcista" entre las financieras del Viejo Continente.
Más allá de la banca, a sólo una sesión de que se conozca el nuevo Gobierno de Mariano Rajoy, otros sectores sensibles a la incertidumbre política pueden dar al Ibex el empujón que necesita para ponerse en positivo en el año. El ladrillo se beneficia del desbloqueo en el Ejecutivo, al reactivarse contratos que permanecían paralizados a la espera del nuevo Gobierno, según explicó Javier Mielgo, de Mirabaud, a Bloomberg. ACS destaca entre las compañías del sector, con una recomendación de compra y el quinto mayor potencial del índice, un 19%.