
Quien firma esta frase es Alfonso de Gregorio, director de gestión de la gestora Gesconsult. No en vano, este experto considera que lo ha pasado con el cierre de tres fondos inmobiliarios británicos ante el temor de recibir reembolsos masivos es "solo la punta del iceberg y es muy previsible que esto se extienda".
Y ya no solo a fondos de filosofía similar sino también a todos aquellos productos que tengan una fuerte exposición a Reino Unido.
De hecho, el Brexit es a juicio de la gestora uno de los grandes riesgos de mercado en este momento en el sentido de que no se sabe cómo se implementará la salida de Reino Unido en los dos próximos años y en qué términos se hará. De ahí que recomienden mantenerse alejados de aquellas compañías españolas con buena parte de su negocio en Reino Unido como IAG. Santander, Sabadell , Telefónica, Ferrovial o Vidrala, y también de los sectores más expuestos a las consecuencias del Brexit como son el financiero o el del automóvil ya que como recuerda Alfonso de Gregorio, "Reino Unido es el cuarto productor europeo de automóviles".
Sin embargo, eso no implica que las recientes caídas que se han visto en los mercados tras el Brexit no hayan traído consigo oportunidades de inversión. De hecho, según afirman aprovecharon la semana pasada para aumentar su exposición en los valores que ya tenían en cartera como Gamesa o Colonial, además de para vender todas las coberturas que habían comprado previamente para cubrirse no solo del riesgo del Brexit sino también del de las elecciones españolas.
Más allá de los riesgos que aún ven en lo que respecta a la renta variable, lo que realmente preocupa más a la gestora es la gestión eficiente de sus carteras de renta fija, donde recomiendan tener mucha prudencia ya que la fuerte caída de las rentabilidades que se están viendo en bonos como el americano, el alemán o incluso el español no están soportados por datos fundamentales sino solo por las compras del BCE. "Si me preguntas si un bono español con una rentabilidad del 1,15% es atractivo, la respuesta es no", apunta David Ardura, subdirector de gestión de la gestora. ¿Dónde ven valor entonces? En bonos flotantes en dólares, que se beneficiarían de una subida de tipos de interés por parte de la Fed y en deuda corporativa europea pero sin incrementar duraciones y manteniendo la calidad crediticia.