La rebaja de rating de España por parte de la agencia Moody's ha pillado de imprevisto a los mercados y ha sido un jarro de agua fría a primera hora de la mañana. Más tarde, la apertura en negativo de Wall Street ante los datos macroeconómicos arrastraron de nuevo al Ibex 35, que cerró como unos de los peores de Europa, y reanimó las ventas en el mercado de deuda. Al cierre se conoció que 12 entidades deberán aumentar capital por unos 15.000 millones.
El Dow Jones (DJI.NY) sufre en el inicio de sesión su mayor caída en el año. Las petroleras están siendo las más castigadas, Exxon y Chevron ceden más de un 3%, cuando el precio del crudo cae en torno a este mismo porcentaje -el barril Texas, de referencia en EEUU desciende hasta los 101 dólares-. Únicamente Mc Donald's salva los números rojos.
En Europa, la rebaja de calificación ha pillado por sorpresa a los inversores a primera hora. El principal indicador de la bolsa española cedió hasta un mínimo intradía de 10.360 puntos. La apertura de Wall Street fue a nueva excusa para los bajistas, que no dejaron alejarse mucho de estos niveles. Finalmente, el descenso del Ibex (IBEX.MC) fue del 1,17%, lo que lo dejó por debajo de su soporte clave en los 10.500 puntos.
El resto de plazas europeas también sufrió la presión vendedora. El italiano FTSE MIB y el británico FTSE 100 (FT100.LO) fueron los peores de la jornada y el resto de Europa cerró en terreno negativo.
En el mercado de deuda, las ventas de bonos españoles a 10 años vuelven a situar su rentabilidad -el rendimiento sube cuando aumentan las ventas- en el 5,5%.
La prima de riesgo, medida como la diferencia entre la rentabilidad que se exige al bono español a 10 años y a su homólogo alemán, asciende a 225 puntos básicos -2,23 puntos porcentuales-, desde los 222 puntos en los que se cerró ayer.