
Este martes llegó el día D, el que nombraron como el Día de la Liberación. El día en el que Donald Trump iba a plasmar de manera oficial todas las amenazas vertidas en estos escasos tres meses como presidente de los Estados Unidos. Y Trump no ha sido laxo. Ha lanzado uno de los mayores ataques arancelarios de la historia reciente. Nadie se ha librado. Un arancel base del 10% para todos los países del mundo, un porcentaje que se intensifica hasta el 20% para los miembros de la UE y China, que suma una nueva restricción del 34% (el impuesto total al gigante asiático será del 54%). El golpe no ha tardado en surtir efecto y en la bolsa europea ya hay un reguero de sangre de las víctimas de la guerra arancelaria de Donald Trump.
Todo aquel que exporte a Estados Unidos sufre las garras del negativo este jueves. Por el momento, bancos, consumo y tecnología son los sectores más afectados del mercado del Viejo Continente. El sector financiero sufre retrocesos de casi un 3,5% en estos primeros compases de la sesión y le sigue de cerca la industria que recoge a las principales empresas de consumo con una caída que también supera el 3%. Por su parte, la industria tecnológica roza el 2,8% de corrección. Las industrias de recursos básicos e industriales también firman descensos de más del 2%.
"El comercio con EEUU es crucial para las economías abiertas europeas. En 2024, las exportaciones de bienes a EEUU representaron el 3,2% del PIB de la eurozona (y el 3,7% en Alemania). Esperamos que el daño del conflicto comercial creciente se manifieste principalmente en una reducción del PIB real, mientras que el efecto neto sobre la inflación probablemente será limitado", explican desde Berenberg.
Pero, ¿por qué la banca es la más afectada? En este sentido, desde Berenberg argumentan que "el BCE tiene más margen que otros bancos centrales para recortar tasas ante un posible shock económico a corto plazo". Esto es, un ajuste monetario más veloz que estreche cada vez más los márgenes de intereses de las entidades financieras.
A todo ello añaden que esperan que ambas potencias comiencen negociaciones serias y, aunque apuntan que lo más probable es que la UE no tome represalias significativas por ahora, sí creen que "podría amenazar con hacerlo si las negociaciones no dan frutos para mediados de año. La UE es un mercado clave para los servicios estadounidenses y las empresas tecnológicas de EE.UU., por lo que podría causar un gran daño", concluyen.
Por nombres propios, dentro del sector bancario europeo, una decena de entidades financieras sufre descensos del 4% o superiores. La mayor sangría la experimentan el banco inglés Standard Chartered, el alemán Commerbank, el italiano BPER Banca y HSBC con desplomes del 7,6%, 5,8%, 4,9% y 4,8% respectivamente.
El reguero de sangre es aún mayor por compañías del sector consumo. Pandora se deja cerca de un 13% de su valor en bolsa en los primeros compases de la jornada y se convierte en la empresa más bajista de toda Europa este jueves. El mercado estadounidense es clave para esta compañía de joyería, que obtuvo en 2024 cerca del 31% de sus ingresos de Estados Unidos. Adidas y Puma también padecen el golpe y ambas firmas deportivas registran desplomes de casi el 9% en bolsa. En el caso de Adidas, la empresa cosechó casi el 22% de sus ventas en territorio americano y el porcentaje se eleva al 24% el caso de Puma. Las caídas de sus cotizaciones también se colocan entre las más abultadas de la sesión en el Viejo Continente.
En el sector tecnológico, Logitech es la que más padece la guerra arancelaria. Sus acciones corrigen un 10%, la segunda compañía que más pierde esta sesión en Europa. La depedencia de su negocio a Estados Unidos escala hasta el 44%. Hexagon y Comet son las dos otras tecnológicas que más ceden, pero reducen la caída al 4% en ambos casos.
Las españolas más afectadas
En territorio nacional, también la banca es la que se lleva el peor impacto. CaixaBank y Banco Santander registran retrocesos en torno al 3,5%. Inditex también sufre y se desploma cerca de un 3,5% (en su caso, Estados Unidos es también uno de sus principales mercados y en él obtiene algo más del 18% de sus ingresos). Asimismo, Bankinter, Unicaja y Banco Sabadell corrigen alrededor de un 3%. También pierden más de un 2% las cotizaciones de ArcelorMittal, Amadeus, Repsol e IAG.
Al otro lado de la tabla, las compañías que aguantan el envite son esencialmente eléctricas e inmobiliarias. Acciona, Solaria, Merlin y Colonial suben por encima de un 2%. Con alzas más moderadas, en torno a un 1%, Redeia, Iberdrola, Enagás y Endesa también se colocan entre las compañías más alcistas de la jornada.
Esta fotografía también puede trasladarse al continente europeo y, por sectores, el real estate y las utilities son las industrias que más avanzan este jueves, con subidas del 2,2% y 1,2% respectivamente.
Estos sectores están aguantando mejor el temporal precisamente por el mismo motivo que los bancos retroceden. Una bajada de tipos de interés más veloz beneficia a sus negocios (que poseen un porcentaje de inversión amplio). Además, este tipo de compañías posee un carácter bond proxy y se convierten en un refugio y una alternativa (gracias a la atractiva rentabilidad de sus dividendos) a la renta fija cuando esta comienza a dar rendimientos menos sugerentes.