
La solidez de la economía de Estados Unidos ha enfriado las expectativas de que se pongan en marcha nuevos recortes de tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) y han tensado la cuerda en el mercado de renta fija con unos bonos del Tesoro a 10 años -cuyos rendimientos muchos expertos esperan que alcancen el 5%- sin tener muy claro qué dirección tomar.
Los datos de creación de empleo en la mayor economía del planeta -256.000 puestos en el último mes- y una inflación subyacente más débil de la esperada, han ofrecido, en todo caso, cierto halo de esperanza a los inversores de que la Fed pueda adelantar de septiembre a junio el primer recorte de tipos de este año.
No obstante, los rendimientos del 'Treasury' americano se dispararon a mediados de semana hasta rozar el 4,8%, máximos de 14 meses, para luego relejarse al conocerse el dato de IPC y descender hasta el entorno del 4,6%, su nivel más bajo desde el pasado 3 de enero después de que el miembro de la Junta de Gobernadores de la Fed, Christopher Waller, haya asegurado que aún son posibles entre tres y cuatro recortes de tipos en el año si el entorno macroeconómico estadounidense se debilita.

En Europa, la evolución de la curva fue similar para los rendimientos del bund alemán que cierran con su primera caída semanal desde principios de diciembre de 2024 condicionados por la situación del mercado al otro lado del Atlántico. Mientras tanto, la rentabilidad del bono germano a dos años, estrechamente vinculados a las expectativas de tipos de Banco Central Europeo (BCE) volvieron a caer tras el dato de de inflación en Alemania hasta el 2,22%, en línea con las estimaciones. El mercado espera ahora que el tipo de facilidad de depósito del BCE supere el 2% en diciembre de 2025.
Así, en el mercado español, ha habido movimiento en la subasta de Letras del Tesoro a tres y nueve meses. En esta ocasión, las de más a largo plazo han sorprendido al frenar su caída y lograr subir en plena incertidumbre monetaria en Europa. En concreto, el organismo el Tesoro Público adjudicó este pasado martes 2.540 millones de euros de los que 1.725,7 millones de euros fueron en letras a nueve meses a un interés marginal del 2,495 %, 0,111 puntos más que en la subasta de hace un mes. En el caso de la emisión a tres meses, se han colocado otros 814,36 millones de euros con un rendimiento marginal del 2,516%, similar al registrado en febrero de 2023.
Por otro lado, el aumento de la rentabilidad de los gilts británicos de principios de semana finalmente se ha desvanecido tras una caída inesperada de las ventas minoristas en Reino Unido en diciembre que, sumados al resto de la batería de referencias, vaticinan un entorno de ralentización económica para el país europeo y abren la puerta a que el Banco de Inglaterra acelere el paso con un recorte de tipos en su reunión del próximo 6 de febrero.
En este contexto, el Gobierno del laborista Keir Starmer está en el punto de mira por la incertidumbre creada en torno a su presupuesto y el cumplimiento de las reglas fiscales que el mercado antoja complicado sin nuevas subidas de impuestos o reducción del gasto público.
El mercado secundario también ha estado pendiente en estos últimos días de la deuda soberana japonesa después de que el bono nipón a 40 años se viera aupado hasta ofrecer una rentabilidad superior al 2,75%, una cifra nunca antes vista, ante las expectativas de que el Banco de Japón tenga que ser más restrictivo en los próximos meses.
El organismo que dirige Kazuo Udea se reúne la semana que viene. A priori, se descuenta que el 24 de enero la institución ajustará al alza sus tipos con una subida de 15 puntos básicos
"Dadas las elevadas valoraciones y la actual incertidumbre económica y geopolítica, creemos que tiene sentido mantener una calificación crediticia media superior a la habitual y controlar la duración de los diferenciales de crédito", explican desde TwentyFour AM (Vontobel) para añadir que el mensaje para los inversores en renta fija es claro: "Mantener la calma y seguir adelante".
Por el momento, los inversores esperan que pueda haber más volatilidad en el mercado a lo largo de los próximos meses tras la toma de poder de Donald Trump este próximo lunes y las previsibles medidas que pueda tomar, en especial, en materia comercial contra China y la Unión Europea.