Bolsa, mercados y cotizaciones

¿Descarbonización a precio de saldo?

Parque eólico marino. Foto: Istock.

Las finanzas sostenibles continúan su desarrollo imparable. El Parlamento europeo publicó recientemente el estándar voluntario de bono verde. Es la primera etiqueta de bono verde respaldada por gobiernos, con mayores requisitos de transparencia y alineación con la taxonomía verde. Asimismo, la industria financiera sigue su curso y amplia la oferta de ETFs que replican índices alineados con la senda de reducción de emisiones adoptada en los Acuerdos de París, toda vez que la Comisión Europea dio su visto bueno a la categorización como artículo 9 (fondo verde oscuro) de los denominados Paris Alligned Benchmarks (PAB). Sin embargo, la realidad en la cotización de la inversión sostenible medioambiental es otra. No hay más que ver el precio de los fondos que dedican toda o buena parte de su cartera a la inversión en valores directamente ligados a la descarbonización, especialmente desde principios de agosto. La fuerte escalada de los tipos de interés (la deuda americana paga un 4,80%, en máximos de los últimos 16 años) y, por tanto, de los costes de financiación, junto a determinadas medidas de estímulo por parte de los gobiernos, incremento de costes y acumulación de inventarios se retratan como culpables del desinterés de los inversores en este tipo de valores. A lo que cabe añadir que nos encontramos en período de realización de pérdidas al finalizar el año fiscal. Visite el portal especializado elEconomista ESG.

El primer grupo de grandes damnificados han sido los desarrolladores de energías renovables, especialmente la energía eólica marina. Su coste marginal casi dobla en el período 2020-2024 debido a la inflación de materias primas y de costes de financiación. En 2023 se ha puesto de manifiesto la necesidad de asegurar costes en el momento de la subasta y no de la toma de decisión final de la inversión, gap que oscila entre 2 y 4 años en esta tecnología más incipiente. Actualmente el coste de generar electricidad por una planta de ciclo combinado en EEUU es un 45% más barato que con eólica marina, con lo que no es de extrañar que acontezcan cancelaciones y retrasos de proyectos y quejas de consumidores. Esta dinámica del mercado eólico off shore ha impacto en el on shore, si bien no se encuentran en la misma situación. Los PPAs (precio acordado en un contrato bilateral de suministro de energía renovable durante un período de tiempo entre los 10-20 años) en EEUU han subido un 25% frente al año pasado, pasando el coste de la inflación y de los tipos de interés, a la par que la subida en costes de instalación ha sido más moderada, ampliándose por tanto el spread de rentabilidad. Le puede interesar: Orsted se hunde un 25% en bolsa tras hacer un 'profit warning'.

La llegada al pico de los tipos de interés debería apoyar a estos sectores, pudiendo ofrecer las abruptas correcciones acontecidas un buen punto de entrada

A pesar de la fuerte expectativa en cuanto a incremento de Mw instalados de energía solar fotovoltaica (se espera que suponga el 55% de la nueva capacidad en EE. UU en 2023), los valores expuestos a inversores y optimizadores se han desplomado ante la falta de visos de recuperación en volúmenes a corto plazo. Las compañías de electrónica y almacenamiento de energía solar, especialmente las orientadas al sector residencial, están expuestas a inventarios altos y clientes que sufren el auge de los costes de financiación y presiones en el capital circulante (instaladores y distribuidores), a la par que el aumento de la competencia pone en duda el valor añadido de su tecnología.

Las viviendas suponen un 30% las emisiones de CO2 de la EU. Al respecto, la propuesta de la Comisión Europa de REPower para instalar 30 millones de bombas de calor en 2030. La ley relativa a la promoción de las bombas de calor en Alemania, que finalmente vio la luz a principios de septiembre, fue menos estimulante que la que se esperaba a principios de 2022. La ley establece que los nuevos sistemas de calefacción utilicen el 65% de energía renovable a partir de 2024. Sin embargo, se puede optar por otra forma de calefacción que use energía renovable, por ejemplo, calderas de gas que usen hidrógeno o calderas eléctricas. De modo adicional, la regulación sobre fuentes de energía renovable no entrará en vigor en las ciudades hasta que las autoridades municipales presenten sus planes relativos a calefacción en 2026-2028. El perfil de crecimiento en Europa se ha deteriorado ante la falta de incentivos y de un racional económico puesto que los precios del gas han caído un 85% frente al pico de 2022. Lea también: Los analistas mejoran su visión para las cotizadas 'verdes' del Ibex.

El entorno macro, como podemos apreciar, no es favorable al desarrollo rentable en el camino hacia la descarbonización y así lo reflejan los precios de cotización. La potencial llegada al pico en los tipos de interés por parte de los bancos centrales y la implementación de los planes de estímulo deberían apoyar a futuro estos y otros sectores esenciales para la reducción de emisiones, pudiendo ofrecer las abruptas correcciones acontecidas un buen punto de entrada.

Miriam Fernández Jiménez es jefa de inversión temática en Ibercaja Gestión.

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