
El precio del petróleo ha despertado de su letargo en 2023 este mes de julio. El barril, tanto estadounidense como europeo, ha cerrado el mes con las subidas más fuertes que se han visto desde enero de 2022, impulsado por la combinación de un fuerte crecimiento de la demanda prevista, junto al deterioro de la producción, principalmente por parte del cártel de productores OPEP+, que finalmente está consiguiendo impulsar los precios gracias a su acuerdo de reducción de oferta.
En el caso del Brent europeo, el repunte de julio ha superado el 14,1%, llevando al precio desde los 74,9 a los 85,6 dólares, una subida que prácticamente ha borrado todas las pérdidas que dejaba el barril en lo que va de año. En los precios actuales el Brent ya sólo cae un 0,4% desde el primer día del ejercicio.
Desde Goldman Sachs están haciendo hincapié en la fortaleza que demuestra la demanda en los últimos meses, ya que, según sus cálculos, se han alcanzado máximos históricos en el consumo mundial de petróleo, y esto está contribuyendo a impulsar los precios del barril en el mercado. "La demanda récord y los recortes de oferta de Arabia Saudí han vuelto a generar déficits", señalan desde el banco estadounidense, e insisten en que "el mercado ha abandonado ya su pesimismo sobre el crecimiento".
Los analistas de Goldman han incrementado el precio objetivo para el barril Brent hasta los 86 dólares en diciembre, y más allá, llegando hasta los 93 dólares en el segundo trimestre de 2024. Si las previsiones de los analistas aciertan, el barril ya no debería subir mucho más de precio, ya que los analistas prevén que el Brent se mueva entre los 83 y los 86 dólares hasta finales del año que viene.
El recorte de oferta tiene éxito
Hasta que comenzó el mes de julio, el cártel de productores conocido como OPEP+ estaba siendo incapaz de generar subidas en el precio del recurso energético. La combinación del temor de los inversores por la posibilidad de que diese comienzo una grave recesión, o un frenazo importante en el crecimiento de la demanda, combinado con una oferta más sólida de lo que se esperaba, sobre todo por el aumento de producción de Estados Unidos, Rusia e Irán, presionaba al barril a la baja.
Sin embargo, una vez Rusia se comprometió a recortar la oferta en 500.000 barriles diarios, y Arabia Saudí anunció que el recorte de la OPEP+ se extendería durante todo el año que viene, los mercados parecen haber decidido que el petróleo se encontraba en precios atractivos para comprar.
Con el sentimiento de mercado a su favor, y los inversores acudiendo en las últimas semanas a los activos de riesgo, como la bolsa o las materias primas, el petróleo parece estar descontando un escenario macroeconómico más positivo del que se esperaba en los últimos meses. Esta semana, de hecho, se ha conocido el dato de PIB de la zona euro, durante el segundo trimestre del año, y se ha confirmado el final de la recesión técnica que estaba sufriendo la economía de la eurozona.
Las materias primas se encarecen
El petróleo no ha sido el único recurso básico que ha pasado por un buen mes este julio. La cesta de materias primas que recoge Bloomberg también ha celebrado las mejores perspectivas para la demanda, en general, con una subida de precio del 5,6% en el mes, el más alcista que se ha visto desde julio del año pasado. Sólo seis materias, de las 34 más importantes que recoge la agencia, se han abaratado en el mes: se trata del arroz, el aluminio, el maíz, el gas natural, la soja y el ganado vivo.