
Unas elecciones nacionales que culminan sin ganador final, la actualización de la hoja de ruta de la política monetaria de la zona euro y un aluvión de resultados empresariales no han impedido que el Ibex 35 alcance esta semana nuevos máximos anuales en bolsa. De hecho, si usamos el flyboard como paralelismo de la bolsa española, podríamos decir que unas exitosas cuentas empresariales sumadas a un BCE que cumplía con el guion establecido –y dejaba en el aire la continuidad de las subidas de tipos– han sido el agua que recoge la moto acuática por la proa y expulsa a gran presión por la popa para propulsar –en este caso– al índice español.
En la propulsión que se utiliza para practicar este deporte veraniego [por las bolsas] también entra en juego el buen dato de PIB que se conocía el jueves de Estados Unidos, que consigue darle otra patada a la inflación y crece un 2,4% en el segundo trimestre de este año, según la estimación preliminar de la Oficina de Análisis Económico (BEA por sus siglas en inglés). En definitiva, un cóctel de datos que sentó bien en los parqués bursátiles, especialmente el jueves, cuando el EuroStoxx lograba batir la resistencia clave en los 4.415 puntos.
"Después de muchos días intentándolo, por fin el jueves el EuroStoxx logró romper finalmente la resistencia horizontal de los 4.415 puntos, que era el techo del rango lateral que acotaba la consolidación lateral durante los últimos cuatro meses y que tenía como soporte los 4.200 puntos", explica Joan Cabrero, asesor de Ecotrader. "Con la superación de los 4.415 puntos se abre la puerta a lo que podría ser el éxtasis final que lleve al EuroStoxx 50 a buscar el techo de Lehman Brothers que se encuentra en los 4.600 puntos, lo que nos da un margen adicional del 5% con el que seguir disfrutando", concluye Cabrero.
En clave española, el empujón alcista no aguantó al viernes –en el resto de principales plazas hubo tibias subidas, de 0,3% en el caso de Europa– y el índice cerró con leves pérdidas del 0,10%. Con unas ganancias del 17,7% en el año, el Ibex alcanzaba el jueves niveles de febrero de 2020 y está a menos de un 4% de recuperar las cotas que transitaba antes del 19 de febrero, el día que se desplomó por la irrupción de la pandemia sanitaria.
Por valores, Indra (que sube cerca de un 8% en la semana) y Fluidra (que se anota un 13% en estos cinco días) cerraban el viernes en máximos anuales. Con todo, el consenso de expertos sigue estoico en la confianza que deposita en el selectivo, con el precio objetivo más elevado desde 2018 y el 80% de sus valores (29 compañías) con el precio objetivo por encima de sus respectivos máximos anuales.
Entre estas 29, hay 11 empresas con una valoración para los próximos 12 meses un 10% por encima de sus altos anuales. Así, sólo seis tienen un precio objetivo por debajo de sus respectivos niveles de cotización más altos del año, según el consenso que agrupa FactSet.
En los primeros puestos, Acerinox, Rovi y Cellnex (ver gráfico), con el precio objetivo que marca el consenso superando en un 24% sus máximos anuales en bolsa. La acerera está en cabeza, ya que el mercado sitúa sus títulos en los 13,43 euros para los próximos 12 meses, un 29% más que los 10,39 euros que anotó el pasado 28 de febrero, día que tocó su alto anual. La compañía, que alcanzaba a principios de julio su valoración más alta del año (en los 13,69 euros) ve un alza del 1,6% en su precio justo en este mes. En su caso particular, los resultados correspondientes al primer trimestre del año no sirvieron como catalizador para sus títulos, al menos, no en el día que se hicieron públicos (26 de julio), donde se dejó un 2,68%. Y es que, la caída de la demanda en el sector del acero golpea las cuentas de la siderúrgica, que gana la mitad que el año pasado en el segundo trimestre y en el primer semestre de 2023 (276,1 millones de euros frente a los 627,1 millones del periodo comparable).
Rovi es la siguiente con más margen entre su techo anual en bolsa y el nivel en el que la ven los analistas para los próximos meses. La farmacéutica forma parte de la jauría de los perros de la bolsa (junto con Fluidra, Cellnex y Grifols). Se trata de aquellas compañías que tras haberse movido durante el año anterior entre las firmas más bajistas (Rovi perdió hasta un 51% en 2022), deberían correr más que ninguna otra los siguientes doce meses, recuperando así parte de las pérdidas acumuladas. De momento, se anota un 20% en bolsa este año, por lo que aún está lejos de borrar las pérdidas.
Tras rendir cuentas ante el mercado el pasado 26 de julio, donde anunció un recorte de su beneficio en un 17%, al ganar 66,6 millones en el primer semestre, así como el aplazamiento para 2024 de la comercialización de Risvan, para el tratamiento de la esquizofrenia, la firma se deja un 6%. Sin embargo, desde Bankinter vierten una valoración positiva de sus resultados: "Baten ligeramente al consenso y la compañía revisa al alza sus guías 2023, espera que la caída sea inferior a la de su guía previa", y ajustan su precio objetivo al alza hasta 52 euros desde los 50 anteriores.
Cellnex es la tercera en discordia, con una valoración de 48,41 euros por el consenso que recoge FactSet, un 25% por encima de los 38,76 euros donde encuentra su máximo anual. La compañía, justo al contrario que Rovi, experimenta un fuerte impulso en bolsa tras rendir cuentas al mercado (el 27 de julio), y ya roza sus máximos anuales. La firma que lidera Marco Patuano aumenta un 18% sus ingresos en el segundo trimestre del año, hasta los 2.001 millones de euros, en pleno esfuerzo por incrementar el crecimiento orgánico. "Los ingresos han crecido, en línea con estimaciones, un 18,4% gracias a la consolidación de las torres adquiridas, la inflación y a un crecimiento orgánico de los puntos de presencia que se sitúa en 7,1%. El margen estable con el opex comparable por debajo de la inflación gracias a las eficiencias, la cobertura y pass through en precio de energía, que permiten elevar el ebitda 16,2%, hasta los 1.490 millones de euros. Un elevado nivel de amortizaciones, superior a nuestra previsión y el mayor gasto financiero, mejor de lo previsto, llevan a registrar unas pérdidas a nivel de beneficio neto en línea con nuestras estimaciones", expresan desde Renta 4.
Las que no 'rompen' el techo
De las 35 compañías que componen el club, sólo seis no cuentan con una valoración por encima de sus respectivos máximos anuales. Estas son ACS, Redeia, Acciona Energía, Enagás, Solaria y Naturgy. No obstante, entre todas las firmas del Ibex, sólo la compañía presidida por Francisco Reynés no cuenta con potencial alcista. Y es que, en aras de valoración, Naturgy es protagonista de diferentes ránquines, unos más positivos que otros. Aunque es la firma que ve un mayor incremento en la valoración en lo que va de julio (de un 7%, según datos de FactSet), lo que deja su precio objetivo en los niveles más altos desde 2008, todavía está lejos de ofrecer potencial y más aún de que esta valoración supere sus máximos anuales.
Banco Sabadell y Bankinter son las otras dos compañías que ven un mayor incremento en el precio objetivo en el mes de julio, y también están en la lista de firmas que ofrecen una valoración por encima de sus techos en bolsa de este año. La entidad presidida por Josep Oliu gana cerca de un 30% en el año y todavía cuenta con un potencial del 23%. Bankinter no está teniendo el viento tan a favor en el curso –y es el único banco español en pérdidas en bolsa en el año, con un 6%– pese a que, cita tras cita, ha presentado unos resultados que baten las expectativas del consenso. Su valoración, no obstante, en los 7,54 euros, se encuentra en máximos históricos. Por recomendación (mantener, muy cerca de levantar el cartel de comprar) también es la mejor desde principios de año. De hecho, en la última semana, Alphavalue le mejora el consejo a comprar.
En cuanto a los índices europeos, por potencial alcista, el Ibex continúa con uno de los márgenes más elevados entre las principales plazas, con un 15,3%, y por encima del EuroStoxx, con un 14%. Y es que, como se adelantaba, el consenso de Bloomberg ya sitúa su precio objetivo en los 11.148 puntos, el nivel más alto de los últimos cinco años.