Los gestores automatizados, más conocidos popularmente por el anglicismo roboadvisors, pueden estar satisfechos con los resultados que han proporcionado a sus clientes, en unos años en los que han debido afrontar varias de las crisis más importantes que han azotado a los mercados, como la pandemia del Covid o la mayor subida de tipos de interés de la historia para atajar una inflación disparada.
Si se compara la rentabilidad de las carteras más defensivas y agresivas de los principales gestores automatizados del sector, y las de un perfil de riesgo medio, con el rendimiento medio obtenido por las categorías de fondos mixtos de características similares de Morningstar, el resultado sale favorable a los primeros, sobre todo cuando se trata de las carteras con más peso en renta variable.
Mientras los fondos mixtos agresivos, aquellos que pueden invertir la mayor parte de su cartera en renta variable, ofrecen un 5,57% anualizado de media a tres años, la cartera de MyInvestor más que la dobla, con un 11,7%, seguido de InbestMe, que casi la duplica, al conseguir un 10,6%, seguida de la de Finanbest, con un 10%; la de Indexa, con un 9%, y la de Finizens, con un 8%.
A cinco años, el rendimiento anualizado es todavía más favorable para los roboadvisors, ya que frente al 2,2% cosechado por los fondos mixtos agresivos, MyInvestor proporciona casi siete puntos porcentuales más, con un 9%, seguido de InbestMe, que logra un 7,7%; Indexa, un 6,4%; Finanbest, un 6,3%, y Finizens, un 5,4%.
Hay que tener en cuenta que cada gestor automatizado tiene sus particularidades a la hora de perfilar sus carteras y realizar la asignación de activos, lo que influye en el rendimiento final, al igual que el coste de gestión, que en algunas firmas varía en función del patrimonio invertido.
Y aunque se hayan analizado las de perfil más arriesgado -en el gráfico pueden compararse también las de perfil más conservador, donde las diferencias pueden ser más amplias, y las de un perfil moderado-, queda claro que a medio y largo plazo ha compensado invertir en alguno de los roboadvisors mencionados, sobre todo si se compara incluso con el 9,53% anualizado a tres años de media y el 5,51% anualizado a cinco años de los fondos presentes en la Liga Global de elEconomista.es.
Jordi Mercader, cofundador y CEO de InbestMe explica que la rentabilidad final depende del perfil de riesgo de cada cartera, que es muy amplio en el caso de su firma, donde cuentan con hasta 11 perfiles. "Por tanto, la rentabilidad oscila mucho. En términos acumulados y desde el año 2015 un inversor habría acumulado un 20% (2% rentabilidad anualizada) para el perfil 1 y hasta el 95% (8% anualizado) en el perfil 10, que tiene casi un 100% de peso en renta variable", señala.
Este éxito de rentabilidad no se ha traducido, sin embargo, en una atracción masiva de dinero o en un gran número de clientes, debido al enorme peso que ejerce la banca en la distribución de fondos de inversión en España. Pero han conseguido abrirse un hueco entre los ahorradores, sobre todo los de perfil más digital.
En el caso de MyInvestor y Finanbest (que se integró recientemente en el banco digital de Andbank), el volumen total es de 3.200 millones de euros, de los que la mitad son productos de inversión, que incluyen tanto carteras como los fondos que los inversores compran por decisión propia.

En Indexa, que está pendiente de la autorización para dar el salto a BME Growth, gestionan 1.372 millones solo en carteras de fondos indexados, y cuentan con 63.421 clientes. "Estamos contentos con la evolución de la firma, que ha crecido de media un 90% anual en los tres últimos años, con beneficios desde finales de 2019. Nuestro objetivo es convertirnos en la gestora independiente con mayor volumen gestionado en España", asegura cofundador y coCEO de la firma, quien se muestra optimista sobre la evolución de la gestión indexada en una era que algunos califican de dorada para el value.
"La rentabilidad futura de la gestión indexada será la misma que la rentabilidad futura del mercado, menos costes. No sabemos prever lo que hará el mercado, y pensamos que nadie lo sabe, pero sabemos que de media, con menos costes los clientes obtendrán una mayor rentabilidad, o menores pérdidas", señala.
En Finizens, que acaban de superar los 20.000 clientes, presumen precisamente del poder de ahorro de comisiones que tienen los roboadvisors frente a las grandes firmas activas. "Desde que lanzamos la firma hace seis años, hemos conseguido que nuestros clientes ahorren más de nueve millones de euros en comisiones frente a las gestoras tradicionales", apunta Giorgio Semenzato, CEO y cofundador de la firma. Y también se muestra confiado en el poder de las matemáticas de la inversión indexada que, a su juicio, demuestran que, "pase lo que pase en los mercados, a largo plazo la rentabilidad que alcanzas está muy por encima de la media, habiendo sido tres veces superior en los últimos 20 años".
Una opinión que comparte Ignasi Viladesau, director de inversiones de MyInvestor, aunque con algunos matices. "El auge de la gestión indexada se basa en la eficiencia de los mercados y en la evidencia de la dificultad de batir sistemáticamente a los índices en el largo plazo. Pero 2022 nos enseñó que la indexación puede no funcionar en momentos de cambio de ciclo como el que estamos viviendo. Hay interés por productos o carteras que complementan la gestión indexada con fondos de gestión activa, tal como viene haciendo Finanbest con éxito desde hace años; y ahí los resultados hablan por sí solos, especialmente en las carteras más conservadoras", explica.