
El viento que comenzaba a tumbar las hojas de los árboles en octubre sirvió, sin embargo, de empuje para las principales bolsas del Viejo Continente que experimentaban desde comienzos del otoño un importante rebote sobre los mínimos del año. Ahora, el EuroStoxx ha puesto fin a la racha de 10 semanas consecutivas en las que cerraba por encima de los mínimos de la semana anterior, confirmando que, a falta de ocho sesiones para que finalice el 2022, el rally de fin de año ha llegado a su fin para los selectivos del continente.
Y, con la resaca aún en el cuerpo de las últimas subidas de los tipos de interés llevadas a cabo por los bancos centrales la semana pasada, este escenario abre la puerta a que los bajistas tomen el control del mercado europeo en las próximas sesiones. "Lo mínimo exigible sería asistir a una corrección del 38,20% de Fibonacci de todo el rebote, pero lo ideal para obtener una ecuación riesgo/recompensa interesante sería asistir al menos a una corrección entre la mitad y dos terceras partes del alza previa", afirma Joan Cabrero, asesor de Ecotrader, quien pone nombre y apellidos a estos niveles teóricos: los 3.735 puntos como primer soporte -de los que el EuroStoxx se encuentra a un 2% de distancia a cierre de la sesión del lunes- y los 3.520 puntos como zona de compra en el EuroStoxx 50.
Para Cabrero, sin embargo, el escenario más probable deja al EuroStoxx sobre el segundo suelo: "Vista la intensidad de la caída del jueves -día de la última reunión del Banco Central Europeo- todo apunta a que las bolsas han optado por la segunda opción, algo que no debe ser visto como negativo ya que podría derivar en un movimiento rápido de caída que a la postre nos permitiría comprar bolsa con una ecuación rentabilidad/riesgo muchísimo más atractiva que la que teníamos hace apenas unas sesiones", concluye, y para las compras agresivas que puedan producirse en esta zona establece un stop de protección en los 3.400 puntos. Así, la bolsa europea tendría por delante una caída del 7,6% hasta los 3.520 puntos. De hecho, el principal índice continental ya acumula una corrección del 4,4% sobre los 3.986 puntos, el pico que llegó a marcar tras rebotar casi un 22% desde los mínimos del año de finales de septiembre en los 3.279 puntos.
Si cede por debajo de los 3.520 puntos Cabrero alerta que "el riesgo bajista sería asistir a una caída hacia niveles donde cotizaban las bolsas europeas antes de la aparición en escena de la vacuna de Pfizer, esto es los 2.900/3.100 puntos del EuroStoxx 50, que es una hipótesis que no puedo descartar en la medida que el rebote no logró batir la resistencia de los 4.050 puntos".
En el caso del Ibex 35, Cabrero visualiza la zona de compra agresiva en los 7.680 puntos -a un 5,6% de distancia-, situando un soporte intermedio en los 7.980 puntos.
"Hasta que no alcance esos soportes no soy partidario de fiarme de un eventual rebote, que podría ser vulnerable. Piensen que después de 10 semanas interrumpidas al alza es poco probable que con apenas una semana y media de consolidación el Ibex 35 ya esté en disposición de retomar de un modo fiable las alzas hacia los 8.800 puntos, que es el techo del canal que viene acotando la fase de consolidación desde mediados de 2021", destaca el experto sobre el selectivo español.
El banco de Japón 'espolea' al yen
Tras las reuniones de tipos de la Fed y el BCE la semana pasada, hoy era el turno del banco central de Japón, que a pesar de anunciar que mantendrá estable el precio del dinero, comunicó su intención de ajustar el rango de control de la curva de rendimiento del bono nipón. De hecho, la entidad central ampliará el rango de volatilidad del rendimiento del bono soberano japonés con vencimiento a 10 años desde los 0,25 puntos porcentuales actuales a los 0,5.
El ajuste de la entidad central japonesa tuvo reflejo en la evolución del yen, que ha dado continuidad al movimiento alcista que venía desarrollando en las últimas semanas y que ya se mueve en una zona no vista desde agosto. La divisa oriental ha llegado a revalorizarse cerca del 3% frente al dólar estadounidense a lo largo del día y ya repunta más de un 13% desde los mínimos de octubre cuando el Banco de Japón se vio envuelto en el debate sobre si volver a intervenir el mercado de divisas tras la debacle protagonizada por el yen.