
Los bajistas de Europa buscan hoy registrar la séptima jornada consecutiva en la que imponer su ley. Lo hacen, eso sí, con la vista puesta en uno de los datos macro más esperados de las últimas semanas, la inflación del mes de septiembre en Estados Unidos.
Los expertos esperan que se quede en un 8,1% con respecto al mismo mes del año pasado. Esta cifra se situaría en línea con la de agosto y seguiría siendo la más baja desde abril. No obstante, cualquier sorpresa positiva o negativa en este ámbito será juez para las bolsas, ya que puede garantizar la esperada subida de 75 puntos básicos más por parte de la Fed en la próxima reunión o, incluso, invocar a la especulación de que el alza de tipos sea mayor, algo que no gustará en los mercados, ya de por sí inmersos en una espiral bajista en las últimas semanas.
Después de la euforia alcista del martes pasado, ningún selectivo en Europa ha sido capaz de registrar una sesión en positivo ante la renovada preocupación de ver un aumento de los tipos de interés más agresivo de lo esperado inicialmente en las principales potencias económicas del mundo. Un comportamiento que ha provocado, de hecho, que índices como el Ibex 35 hayan perdido ya todo lo ganado en el rebote de la semana pasada.
El selectivo español ha llegado a cotizar en las últimas horas cerca de los mínimos de la semana pasada en los 7.240 puntos, un entorno de soporte que "coincide además con los mínimos del año que marcó el pasado mes de marzo en los 7.287 puntos, que en el Ibex con dividendos serían los 22.500 puntos", explica Joan Cabrero, analista técnico y director de Ecotrader.
De la perforación de dicha zona depende que se pueda asistir a una caída hacia los mínimos de octubre de 2020, que es justo donde cotizaba el Ibex antes de la aparición en escena de la vacuna de Pfizer.
En Europa el riesgo de asistir a una caída hacia la zona de los 11.000/11.300 puntos del DAX 40, que encajaría con una profundización de la corrección del EuroStoxx 50 hacia la zona de los 3.000 puntos, "que en numerosas ocasiones he señalado que es el entorno al que había que esperar antes de volver a comprar bolsa europea (poner el segundo pie), que es donde cotizaban las bolsas europeas justo antes de la aparición en escena de la vacuna de Pfizer y cuyo alcance supondría una corrección del 61,80/66% de toda la subida desde los mínimos de 2020", señala Cabrero.
Pendientes del BoE
La libra quiere dar continuidad a la tendencia bajista que registra en el conjunto de 2022. En la sesión de hoy sigue con los descensos y cede terreno frente a los cruces más negociados del planeta ante una nueva sesión de compra de bonos en Reino Unido que se ha producido después de que el Banco de Inglaterra haya reiterado su opinión de que su apoyo de emergencia para el mercado de bonos cesaría el viernes, lo que contradice los últimos rumores aparecidos en los medios, que sugerían que podría durar. La "esencia" de una intervención para apoyar la estabilidad financiera "es que es temporal", explicaba el gobernador del Banco de Inglaterra (BoE), Andrew Bailey.
Mientras tanto, las compras de bonos han generado un aumento en la rentabilidad del bono a 10 años británico que ya roza de nuevo el 4,5%, su nivel más alto desde 2008, a las puertas de la reunión de politica monetaria que llevará a cabo mañana.