
Era 20 de marzo, o lo que es lo mismo, en pleno estallido de la pandemia del coronavirus, cuando el euro alcanzó su mínimo anual frente a la moneda estadounidense y perdía el entorno del 1,10. Un nivel que ayer volvió a tocarse por primera vez desde el Covidcrash, cuando el euro se cambiaba a 1,09 frente al dólar, a cierre del mercado europeo.
Desde que Vladimir Putin ordenara la invasión de las tropas rusas en Ucrania el pasado 24 de febrero, la incertidumbre y el temor han conquistado el pulso de la mayoría de indicadores bursátiles y divisas. Así, desde aquel día, el euro frente al dólar ha descendido un 3,5%, alcanzando un nivel que no visitaba desde hace dos años, cuando el mundo moderno se sumía en una crisis sanitaria sin precedentes. Así, desde el inicio de 2022, la moneda europea contra el billete verde cede casi un 4%.
"Las divisas europeas se han visto afectadas, mientras que el dólar, como puerto seguro, se ha fortalecido de nuevo cuando los primeros titulares han señalado el peligro que suponen los reactores dañados y han sugerido que los bombardeos rusos impiden a los bomberos entrar a las centrales", expresan desde Monex Europe. Y es que, en tiempos de inestabilidad, el dólar se alza como un activo refugio mucho más pontente que el euro, ya que es la moneda de referencia mundial en los mercados financieros.
La fuerte relación de la divisa con los tipos de interés es otro de los focos de este descenso. A diferencia de la Reserva Federal estadounidense (Fed), la guerra en Ucrania va a obligar al Banco Central Europeo (BCE) a retrasar la primera subida de tipos de interés en la eurozona hasta enero de 2023.
Caída histórica del rublo
Fue este 24 de febrero cuando la moneda rusa rompió la barrera psicológica que fijó en 2014 –cuando un dólar se llegó a cambiar por 60 rublos–, con las primeras sanciones de Crimea, tocando los 86,60 rublos por dólar. Las represalias internacionales impuestas desde Estados Unidos y sus socios europeos con el bloqueo del uso de sus enormes reservas de divisas al Banco Central de Rusia, que está compuesto por el euro, dólar estadounidense y libra esterlina en casi el 60%, culmina en una caída del rublo del 34% desde el inicio del conflicto.