Las ventas magnánimas sufridas ayer por todos los índices europeos arrojan ya un balance importante de pérdidas que superan el 10% en el año en el caso del EuroStoxx 50 y del Dax alemán. El Ibex 35, que el año pasado quedó a la cola de todas las compras que vivieron las bolsas, hoy se posiciona como la plaza menos bajista desde enero, con un recorte del 5,9% tras el batacazo del 2,85% de ayer. Y eso a pesar de que el sector bancario -que representa un tercio del índice- fue el más castigado de Europa, con un desplome superior al 8% en la sesión.
Las caídas se fueron conteniendo tras la apertura más contenida de Wall Street, aunque afectaron principalmente al mercado alemán, dada la vinculación y relaciones comerciales -más estrechas- que mantiene con Rusia. Para el Dax la caída de ayer, del 4%, fue la mayor sufrida por el selectivo desde la aparición de ómicron, pese a que llegó a retroceder más de un 5,6% durante la sesión. En lo que va de año sus pérdidas alcanzan el 11,6% y desde los máximos históricos que tocó en enero -en los 16.271 puntos- retrocede ya un 13,6%. Ayer la mayor caída fue para Deutsche Bank, por encima del 12%, seguida de Continental, proveedor de neumáticos, y también se vieron caídas de más del 7% entre las grandes automovilísticas como Porsche, BMW o Mercedes. En el balance anual, dentro del selectivo de Fráncfort, las mayores ventas siguen concentradas en todo lo suene a confinamiento y delivery, como Delivery Hero, HelloFresh o Zalando, con pérdidas abultadísimas, del 55% al 22% desde enero.
El impacto que ha tenido la guerra iniciada por Rusia en Alemania no ha sido de tal magnitud en otros parqués. En el caso de la bolsa parisina o del EuroStoxx 50 el desplome de ayer, aunque de bulto, fue algo menor. El índice europeo salvó al cierre los 3.800 puntos. Su corrección desde enero roza el 11% ya, y desde máximos de enero la caída se acerca al 14%. Los grandes bancos, en bloque, se colocaron ayer a la cola del selectivo, con pérdidas próximas al 9% para ING Groep, y cercanas al 8% para Intesa San Paolo, Banco Santander y BNP Paribas. Las grandes automovilísticas -además de las alemanas, a las que se suma Stellantis- sufrieron caídas de más del 7%, al igual que BBVA, con un 6%. Solo dos firmas cerraron en positivo ayer, Adyen e Iberdrola, con ganancias del 0,94% como demostración de su perfil de valor refugio.
La Bolsa de París aguantó al cierre los 6.500 enteros, a pesar de que los perforó durante la sesión. Su recorte en el año ya es del 8,8% y desde los máximos históricos marcados en enero, la caída ronda el 12%. Société Géneralé fue ayer el valor más penalizado, con un desplome del 12%, seguido de Renault, con un 9%. En EEUU, el S&P 500 superó ayer una corrección del 14% en el año, con el Nasdaq 100 por encima del 16,6%.
La volatilidad se dispara
El índice VDax, hermano gemelo del Vix estadounidense, se disparó ayer hasta los 40 puntos, una cota que no tocaba desde finales de octubre de 2020, momento en el quela segunda ola del virus se extendió dramáticamente por Europa antes de que se descubrieran las vacunas. Y lo mismo sucedió en EEUU, el VIX escaló un 19% en la sesión, con la onza de oro en máximos de enero de 2021, y el S&P, en mínimos de mayo.