Una recuperación inédita. Consecuencia de una crisis inédita. La V de la que tanto se hablaba hace apenas un año se observará, mucho más clara que en otros ámbitos económicos, en la rentabilidad de las empresas. El margen operativo de la bolsa española se recuperará cerca de 4 puntos porcentuales tras hundirse en mínimos registrados en 2020 por la pandemia de coronavirus. Las previsiones de los analistas apuntan a que las compañías cotizadas no financieras expandirán su rentabilidad -el benefico neto de explotación (ebit) obtenido de las ventas- del suelo del 5,7% al 9,8% en 2021, superando incluso el 8,4% de 2019 y rozando el máximo de la última década, el 10% de 2018, el techo de la anterior reconstrucción.
Esta recuperación en un solo ejercicio es prácticamente la misma en puntos porcentuales que, tras el suelo de la crisis financiera -el 6,2% de 2015-, les costó tres años conseguir a las cotizadas españolas, según el Ecomargen, la herramienta de elEconomista que calcula la evolución del margen operativo de las 60 empresas más capitalizadas entre las que cuentan con un seguimiento de al menos cuatro analistas -excluyendo a bancos, aseguradoras y socimis-.
Esta previsión ha mejorado cinco décimas, del 9,3% al 9,8%, desde finales de octubre de 2020. Esas fechas del año pasado son el punto de inflexión de la pandemia, ya que coinciden con los días previos a que el anuncio de la farmacéutica Pfizer sobre el desarrollo de su vacuna aportara visibilidad a la reconstrucción económica tras el shock del Covid-19.
En estos seis últimos meses, y ya anteriormente, muchas empresas se han afanado en reducir costes para mejorar sus márgenes, una de las principales ratios para medir la salud de los negocios, y acelerar la recuperación.
Con el shock de oferta y demanda de la pandemia, las estimaciones se hundieron rápidamente, pero la protección del empleo -principalmente mediante los Ertes diseñados y financiados por el Gobierno-, los fondos de reconstrucción de la Unión Europea (UE), la extraordinaria batería de medidas de política monetaria desplegada por el Banco Centro Europeo (BCE) y, por último, un ritmo de vacunación que por fin apunta hacia la inmunidad en próximos meses, o incluso semanas, han favorecido que se espere una rápida recuperación.
Debilidades
En las crisis afloran las debilidades de los distintos negocios y la rentabilidad se vuelve clave para defender las expectativas de beneficios por parte de las empresas. Las más defensivas dependen de una demanda inelástica, que no varía excesivamente ante este tipo de shocks -electricidad, servicios regulados, farmacia, alimentación y otros productos de primera necesidad son segmentos de actividad que sufren menos-, mientras que otras compañías pueden salvar la situación si parten de una posición dominante o con costes muy bajos.
En la bolsa española, y con premio para sus acciones, ya en 2020 se puede extraer una lista del primer grupo de este tipo de empresas, como Endesa, Iberdrola, Euskaltel, Enagás, Red Eléctrica, Almirall, Faes Farma o Ebro Foods, y observar cómo otras han conseguido sostener la tendencia de crecimiento pese a la crisis, como Cellnex, algunas relacionadas con las energías renovables, como Solaria -hasta alcanzar el Ibex 35- o Grenergy, y excepciones notables como las industriales Fluidra, Viscofan y Vidrala.
El resto necesita afrontar dolorosos ajustes y largas transformaciones, como ocurrió tras la caída de Lehman Borthers en 2008 y de los que ahora son ejemplos los ERE de las industriales Airbus o Tubacex o de la hotelera NH. O esperar un restablecimiento rápido de la normalidad, como el que empiezan a garantizan las vacunas.
Los 9,8 euros de ebit (beneficio neto de explotación ) que los analistas estiman que la bolsa española consiga por cada 100 ingresados en 2021 implican un crecimiento de las ganancias operativas de cerca del 107%, tras hundirse un 44% en 2020.
En ningún año posterior a 2008, el ritmo de recuperación del beneficio operativo fue tan acelerado y vertical, lo que se podría estar reflejando en el 30% que sube el Ibex 35 desde que el 9 de noviembre de 2020 Pfizer anunciara un 90% de efectividad de su vacuna, a la que posteriormente, y en cascada, se sumaron la de Moderna, la de Astrazeneca o la de Johnson & Johnson.
Entre las empresas cotizadas más grandes, todas conseguirán un fuerte rebote de su rentabilidad entre 2020 y 2022, destacando la recuperación de Amadeus desde pérdidas o los ocho puntos porcentuales de Cellnex (ver gráfico). Las excepciones son las utilities, cuya condición defensiva impidió que se hundieran el año pasado, y Telefónica, la peor parada.
Recuperan el beneficio, pero no las ventas
Ya en este 2021, la mejora de márgenes permitirá a algunas empresas de la bolsa española recuperar antes beneficios operativos previos a la pandemia, que ingresos. ArcelorMittal y Airbus son dos ejemplos entre las grandes cotizadas. Ambas obtendrán ganancias de 2019 gracias a las reestructuraciones y a otras razones coyunturales, ya que no aumentarán sus ventas. También lo conseguirán de la misma manera Logista, Atresmedia, Applus, Almirall y Tubacex. Esta última industrial se acerca a los 100 días de huelga en sus plantas de Álava precisamente por los despidos planteados.