Elon Musk se ha convertido en un auténtico gurú de todo lo que suene a futurista. Su legión de seguidores espera cada día las novedades de los nuevos sistemas de transporte ideados por el sudafricano (los vehículos eléctricos de Tesla, los viajes espaciales de SpaceX, el transporte subterráneo de The Boring Company...) o sus innovaciones con Neuralink. Pero además se ha transformado en un apologeta de las criptomonedas, especialmente del bitcoin y el dogecoin. Ahora sabemos uno de los motivos: lleva desde 2019 trabajando con los desarrolladores de esta última
El desarrollador de Dogecoin, Ross Nicoll, ha confesado que el fundador de Tesla lleva dos años colaborando con ellos -desde que fue elegido CEO honorario de la criptodivisa- para "mejorar el rendimiento de las transacciones", según ha declarado al medio especializado Decrypt.
Así, Musk parece mostrarse preocupado por el alto coste ecológico de la minería y transacción de bitcoins, algo a lo que ha aludido esta misma semana en su cuenta de Twitter. Es la justificación que ha esgrimido para que Tesla deje de admitir el pago de vehículos con la más popular de las criptodivisas. De hecho, según las estadísticas de la Universidad de Cambridge, el bitcoin ya consume más energía que todo el país de Suecia y está a las puertas de igualar a Egipto.
Tesla & Bitcoin pic.twitter.com/YSswJmVZhP
— Elon Musk (@elonmusk) May 12, 2021
En este sentido, Nicoll ha afirmado que esperan seguir reduciendo el consumo de energía del dogecoin, que estiman que ya se limita al 7% de lo que lo hace el bitcoin.
Además, Musk se habría ofrecido a financiar el desarrollo de la criptomoneda que nació como una broma, pero el equipo de cuatro desarrolladores rechazó la oferta.
El apoyo del magnate a esta criptodivisa ha sido decisivo para su revalorización en lo que va de año. La moneda digital arrancaba 2021 cotizando por debajo de los 0,01 dólares y actualmente ronda los 0,53 dólares tras marcar máximos por encima de 0,71 dólares hace unos días. Su capitalización supera los 68.500 millones de dólares.
En el lado opuesto se encuentra uno de los fundadores del dogecoin, Jackson Palmer, que se desvinculó del proyecto en 2018 y que considera absurdo el valor que ha alcanzado lo que nació como una broma. Esta semana tuiteó que Musk era un "estafador autocomplaciente", aunque borró el mensaje pocos minutos después.
Nueva actualización
Por otra parte, Nicoll ha anunciado que están finalizando la actualización 1,21 de la criptomoneda, el mayor avance desde 2019, para "mejorar la velocidad de sincronización" y que las copias de seguridad de la cartera sean válidas para siempre.
Además, otro aspecto en el que están trabajando los desarrolladores es en reducir las comisiones por transacción de los 0,4 dólares actuales a 0,01 dólares, para lo que necesitarán negociar con los mineros para que asuman esta rebaja.