A las más que conocidas incertidumbres a las que tienen que hacer frente los alcistas en el mercado de renta variable -tanto en Europa como al otro lado del Atlántico- ayer se sumó una nueva: la pérdida de fe de un acuerdo entre demócratas y republicanos para negociar un acuerdo de estímulo económico en la principal potencia económica del planeta, EEUU.
El desvanecimiento de las esperanzas de un pacto entre ambos bandos se formalizaba ayer en el mercado estadounidense, que acumulaba un descenso superior al 1,5% en la sesión que llevaba a muchos de sus selectivos más relevantes y vigilados a perder los soportes de corto plazo a los que se enfrentaban.
Las bolsas de EEUU cayeron a su nivel más bajo en dos semanas durante la primera sesión de la semana y ahora, índices como el Nasdaq "sugieren una debilidad que podría cancelar la posibilidad de ver un ataque a máximos del año", asegura Joan Cabrero, asesor de Ecotrader.
Algo cuanto menos preocupante porque "Wall Street es la madre del cordero y no tengan ninguna duda que Europa consolidará más o menos dependiendo de lo que suceda al otro lado del Atlántico", señala el experto.
A este lado del Charco, las bolsas europeas demostraron ayer las serias dificultades que tienen para salir de la parte central de su amplio lateral con una sesión que fue de más a menos en la que cerraron lejos de los máximos establecidos en las primeras horas.
"La cesión de los 3.170-3.180 puntos abriría la puerta a una probable caída que podría buscar la zona de los 3.000-3.050 puntos, que es la base del lateral que viene acotando la consolidación durante los últimos meses", apunta Cabrero quien incide en que el primer nivel a vigilar se encuentra un 2% de distancia de los niveles de cierre de ayer.
En el caso del Ibex 35, el riesgo de ver una corrección más profunda sigue latente. El nivel a vigilar se encuentra en los 6.700 puntos. Su pérdida "abrirá el riesgo de ver finalmente una caída hacia soportes que hace meses valoramos como son los 6.420 puntos", sentencia el experto.