Madrid
Reinventarse o morir. Hay algunas compañías que han sido punteras en otras épocas pero que el paso del tiempo las ha dejado en la estacada, como sucedió con Kodak. El otrora gigante de la fotografía y pionero en las cámaras modernas analógicas no cogió el tren de lo digital y prácticamente firmó su sentencia de muerte tras el cambio de tendencia en el sector.
Sin embargo, la vida empresarial, a veces, también da otra oportunidad y eso es lo que le ha pasado a la estadounidense, que ha firmado un acuerdo con el Gobierno americano para producir ingredientes para los medicamentos contra el coronavirus, entre los que destacaría la hidroxicloroquina. El Estado les concederá un préstamo de 765 millones de dólares para llevarlo a cabo.
La noticia disparó el interés inversor por una Kodak (muchos a través del bróker Robinhood) que llevaba muchos años deprimida en el parqué, capitalizando menos de 100 millones. Sus títulos llegaron a rebotar casi un 1.500%, es decir, multiplicó su valor en bolsa por 16 en apenas unos días. Aunque posteriormente se desinfló bastante, cayendo más de un 60%, todavía su precio es 4 veces el que era, capitalizando cerca de 550 millones a media sesión del lunes.
Hay que recordar que Kodak tiene casi 130 años de historia, pero la compañía quebró en 2012 y se reestructuró para volver al mercado dos años más tarde. En 2014 marcó sus máximos desde que volvió al parqué, capitalizando algo menos de 1.600 millones de dólares, algo más de su último pico.
Problemas con la SEC
Las fuertes ventas de los últimos días han llegado después de que los demócratas denunciaran movimientos extraños en la acción antes del anuncio. En concreto, el día de antes, según apunta Wall Street Journal, sus títulos ya movieron mucho más volumen del habitual, con un ascenso del 25% de su valor.
Ahora, sus títulos ya han perdido casi dos terceras partes de lo ganado ante la investigación iniciada por la SEC (el regulador del mercado americano) el martes de la semana pasada.
